Michael Sam es el primer jugador de fútbol americano que se atrevió a revelar su homosexualidad. Después de eso, asegura que la NFL no le ha dio un trato justo.
Su carrera como jugador profesional fue muy breve, pues fue reclutado en 2014 y se retiró apenas un año después. Dicha decisión la compartió al compartir que tenía problemas de salud mental.
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El jugador indicó que para superar estos problemas tenia que trabajar en el perdón; perdonar a miembros de su familia que continúan sin aceptarlo y a la NFL.
Fue durante una presentación en la Universidad de Nuevo México, donde Michael compartió con los estudiantes algunas de las cosas que ha tenido que enfrentar.
Recordó que creyó que iba a ser reclutado a finales de la segunda ronda, sin embargo, no fue así.
“Creo que si nunca hubiera salido del armario, si nunca hubiera dicho esas palabras al público, todavía estaría en la NFL”, se lamentó.
Michael perteneció brevemente a los Ramos de la NFL de St. Louis y los Cowboys de Dallas y los Alouettes de Montreal de la liga Canadiense de Fútbol.
Confesó que durante ese tiempo vivió dos momentos especialmente negativos con sus compañeros.
Además, reveló que Jason Garret, entrenador de los Dallas Cowboys, sólo habló con él dos veces, cuando se unió al equipo y cuando lo despidieron.
Al hablar sobre aceptarse a si mismo, contó que decidido dejar de ocultarse cuando terminó una relación por que se sentía avergonzado de ser gay.
Pese a lo breve de su carrera, personajes como Michael pueden ser una gran inspiración para otras personas que luchan a diario consigo mismas por dar a conocer quienes son en realidad.
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