Fue un festival de libertad y también una reivindicación
Más de 15 mil personas participaron en la Marcha del Orgullo Gay en Jerusalén
Unas 15,000 personas marcharon en el desfile anual del orgullo gay de Jerusalén este jueves, con más de 2,000 policías asegurando el evento, informó el sitioThe Times of Israel.
La Policía dijo que 17 personas fueron arrestadas, incluida una que se descubrió que llevaba un cuchillo y se negó a identificarse. Los detenidos eran sospechosos de “intentar perturbar el evento y el desfile”, dijo un comunicado de la Policía.
El desfile se produjo horas después de que el primer ministro Benjamín Netanyahu nombrara como ministro de Justicia al miembro de su partido Likud, Amir Ohana, convirtiéndose en el primer miembro gay en un gabinete de gobierno en la historia del país.
Ohana se presentó al desfile, pero fue abucheado por algunos de los participantes, aparentemente debido a su alineación al partido gobernante.
Algunas de las pancartas en contra de Ohana exclamaban en hebreo y árabe, “El nacionalismo extremista no me representa”.
La ruta de 2,5 kilómetros, desde el Parque de la Campana de la Libertad hasta el Parque de la Independencia, comenzó a las 17:30 p. m. de este día. La Policía estimó la participación en alrededor de unas 10,000 personas, muy por debajo de las 30,000 esperadas en la marcha.
El número fue menor que en años anteriores. En 2016, participaron unos 25,000, muchos en solidaridad con la comunidad LGBTTTIQ tras el ataque mortal contra la adolescente Shira Banki, de 16 años, asesinada en plena marcha en 2015 por el israelí religioso Yishai Schlissel.
De manera preventiva, 2,500 oficiales fueron desplegados a lo largo de la ruta y, por primera vez, se les pidió a los participantes que proporcionaran una identificación antes de ingresar al evento.
La seguridad se ha mantenido en ciernes desde 2005, cuando Schlissel apuñaló a varios participantes. Diez años más tarde, Schlissel, después de salir de prisión, mató a Banki. Desde entonces, la Policía ha reforzado regularmente la seguridad alrededor de la marcha.
A lo largo de la ruta, los manifestantes se detuvieron para depositar flores en el lugar de la calle Keren Hayesod, donde Banki fue apuñalada hasta la muerte.
El padre de Banki, Uri Banki, acudió este año a la marcha.
“Marchamos hoy en memoria de Shira y también para apoyar la tolerancia en Israel”, dijo Uri Banki a medios. “La tolerancia es algo que es fácil para nosotros exigir a los demás y mucho más difícil de sostenernos”.
La Policía había preparado una lista de docenas de posibles alborotadores que fueron puestos bajo supervisión desde la mañana, informó el Canal 12 israelí.
Una manifestación contra la marcha del orgullo gay se llevó a cabo en las cercanías por la organización israelí judía de extrema derecha Lehava, que así como se opone de manera racista contra los árabes-israelíes y los palestinos, está en contra de la asimilación de los judíos y a la presencia de cristianos en Israel.
Según el Canal 12, la Policía superó en número a los aproximadamente 150 manifestantes, y las barreras de metal les impidieron acercarse al evento del orgullo.
La policía tuvo un gran despliegue de seguridad para garantizar que todo transcurra sobre ruedas. Y en efecto, la marcha fue tranquila, aunque fueron detenidas casi 60 personas por sospechas que planeaban alterar la marcha. No se reveló ningún plan violentos, sino de gritos opuestos en medio de la marcha y cosas similiares, pero las detenciones fueron por las dudas. Esto, salvo el caso de un hombre que fue hallado con un cuchilo, pero que luego se dijo que al parecer, no estaba en su sano juicio.
Entre la gente bailando, conversando y enarbolando banderas con la estrella de David sobre los colores del arco iris, había numerosos puestos. Algunos vendían recuerdos multicolores y muchos otros, material explicativo sobre el grupo al que representaban. Y en un puesto de una organización religiosa, también repartían velas de shabat.
Un elemento especialmente interesante era la presencia de jóvenes y mayores religiosos, en apoyo a la marcha, tanto miembros de la comunidad LGBT como quienes no lo eran pero afirmaban que “esta gente no tiene por qué sentirse sola o mal”. Bajo distintos nombres y títulos, una diversidad de israelíes observantes de la religión, aunque no ultraortodoxos, nos recordaban que “D´s nos creó a todos a su imagen y semejanza”.
El líder de Lehava, Bentzi Gopstein, un discípulo del fallecido rabino extremista Meir Kahana dijo: “El objetivo de la marcha [del orgullo gay] es destruir los valores de la familia judía y convertir a Jerusalén y a todo Israel en Sodoma. Vamos a demostrar para que todos sepan que no hay acuerdo para abominación y daño a la identidad judía del Estado”.