Siempre en el centro de la polémica, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a recibir duras críticas desde varios frentes. El motivo, esta vez, es su intento de mediar para lograr la libertad del rapero A$AP Rocky, detenido en Suecia a principios de mes.
El presidente estadounidense ha llegado incluso a ofrecerse a pagar la fianza, algo que el sistema de justicia sueco no contempla, pero no solo no ha logrado su libertas, sino que ha sido duramente criticado por el Gobierno sueco y por estrellas como Justin Bieber.
Rakim Mayers, conocido artísticamente como A$AP Rocky, fue detenido el 3 de julio a la salida de un concierto de hip-hop en Estocolmo, por agredir a un hombre joven tras una acalorada discusión. Motivo por el cual tuvo que cancelar su gira europea, que incluida su actuación en el Sónar este fin de semana pasado.
El rapero de 30 años acababa de actuar y caminaba junto a su guardaespaldas y otros compañeros por las calles de la capital sueca cuando fue abordado por un grupo pequeño de personas que les increpaba, como se puede ver en los numerosos vídeos que han circulado por las redes sociales, incluida la del propio A$AP.
El rapero y su entorno repiten una y otra vez a los individuos que no les sigan, pero la discusión se va calentando y A$AP acaba lanzando a uno de ellos contra el suelo de manera muy violenta y lo golpean entre varios una vez ha caído.
La justicia sueca detuvo tras el incidente al artista y lo envió a prisión por el “alto riesgo de fuga” existente, al tratarse de un extranjero con muchos recursos económicos. Muchas personalidades salieron en su defensa y pidieron su libertad, entre ellos el rapero Kayne West.
La simpatía entre West y Trump es de sobra conocida, por lo que no parece extraño que el presidente estadounidense se haya apresurado a mediar en este caso. El mandatario anunció a través de su cuenta de Twitter que tras hablar con West sobre su amigo encarcelado, llamaría al primer ministro sueco para “ver que se puede hacer” para ayudar a A$AP. “Mucha gente querría ver que este asunto se resuelve pronto”, manifestaba.
Pero las conversaciones con Stefan Löfven, primer ministro sueco, no salieron tal y como había previsto Trump. Ambos mantuvieron una llamada de unos veinte minutos que, según el portavoz del primer ministro en declaraciones al New York Times, fue “amigable y respetuosa”.
Trump, además, explicó que el mandatario sueco le había asegurado que el rapero sería tratado de forma justa. Además, incluso se ofreció a pagar su fianza, a pesar de que el sistema sueco de justicia no contempla esta figura.
“En Suecia todo el mundo es igual ante la ley”, recuerda el primer ministro a Trump
Unas acusaciones que el director de la prisión de Kronoberg, donde está arrestado A$AP, Fredrik Wallin, niega rotundamente. En declaraciones que han recogido varios medios locales y estadounidenses asegura que el artista bebe de la misma agua que el personal de la prisión y ha hecho público uno de los menús semanales que ha recibido.
Además, la misma prisión tiene a disposición de todo el mundo a través de su página web, fotografías de cómo son las celdas de la que es la prisión más importante del país, con capacidad para 321 internos.
Son muchos los artistas que han apoyado al rapero y han pedido su excarcelación, algo que el presidente Trump ha pretendido utilizar a su favor, aunque no le ha salido bien. El archiconocido Justin Bieber publicó un tuit muy duro con su administración en el que agradecia sus esfuerzos por liberar a A$AP, pero añadía: “Mientras está en ello, ¿podría también sacar a los niños de esas jaulas?”, en referencia a los miles de menores que se encuentran en los centros de detención de la frontera con México.
El rapero estadounidense deberá permanecer en prisión preventiva hasta el 25 de julio, cuando está previsto que se celebre una nueva vista para determinar si lo ponen en libertad, o sigue bajo arresto a la espera de que se conozca la fecha del juicio que, según medios locales, podría ser en agosto.