Los protestantes evangélicos blancos en Estados Unidos sostienen posturas marcadamente distintas con respecto a otros grupos religiosos en cuanto a si el Gobierno debe intervenir en el aborto y la comunidad LGBT, dos de los temas más espinosos de la campaña electoral de cara a las elecciones del 2020, indica una encuesta.
En cuanto a las restricciones al aborto -hacerlo ilegal, incluso en casos de violación, incesto o cuando peligra la vida de la madre- el 37% de los estadounidenses en general se pronuncian a favor, según el sondeo realizado por la AP y el Centro NORC para Estudios de Asuntos Públicos. Sin embargo, para los protestantes blancos evangélicos fue de 67%.
Para los protestantes blancos en general, el porcentaje fue de 39%, para los protestantes no blancos fue de 33% y para los católicos fue de 45%.
Una discrepancia similar existe en cuanto a si el Gobierno debe proteger a los gays, lesbianas, bisexuales o transgénero de la discriminación. Entre los católicos, protestantes blancos y protestantes no blancos, la proporción fue de seis de cada 10 a favor, pero sólo un tercio de los blancos evangélicos protestantes estuvo a favor de esas protecciones.
Las discrepancias entre los evangélicos blancos y los demás grupos religiosos, así como los laicos, fueron menos pronunciadas. Pero la encuesta apunta a que los evangélicos protestantes blancos coinciden más con las políticas conservadoras de los republicanos y del presidente Donald Trump, comparado con otros grupos de fe. Los evangélicos blancos, además, tienen a opinar más que otros grupos que la religión debe desempeñar un papel en la elaboración de las políticas públicas.
El reverendo Franklin Graham, hijo del fallecido reverendo Billy Graham y uno de los partidarios evangélicos acérrimos de Trump, señala que la postura antiaborto del mandatario estadounidense es una de las razones por la que los evangélicos lo apoyan tanto.
“No creo que los evangélicos coincidan totalmente con todas las posiciones del presidente, pero sí reconocen que es el presidente más pro-vida en la historia moderna”, declaró Graham en una entrevista reciente. “Ha designado jueces conservadores que afectarás las vidas de mis hijos y mis nietos, mucho después de que se vaya”.
De hecho, el apoyo de los evangélicos blancos a políticas que restrinjan el aborto fue mucho mayor a la mayoría de los demás temas en el sondeo. Aproximadamente ocho de cada 10 evangélicos blancos afirman que la religión debe influir en algún modo en la elaboración de políticas hacia el aborto. Una proporción similar dijo lo mismo en cuanto a la pobreza, comparado con 7 de cada 10 en cuanto a la educación y 6 de cada 10 en cuanto a la desigualdad social, la inmigración y los derechos de la comunidad LGBT.
Trump ha sido un férreo opositor del aborto, y su Gobierno se ha resistido a las leyes que conferirían amplias protecciones a individuos LGBT.
Aproximadamente ocho de cada 10 evangélicos blancos apoyan a Trump, según la encuesta.