Esperanza Aguirre se da un baño de masas para celebrar sus seis años de gobierno
Cientos de simpatizantes y la plana mayor de su Ejecutivo arroparon a la presidenta en un acto en el que hubo tiempo para todo, incluido algún que otro baile, y críticas a Zapatero
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, olvidó este jueves cualquier sombra negra sobre los acontecimientos de los últimos tiempos para celebrar el aniversario de sus seis años de gobierno.
Aguirre se lamió las heridas en compañía de todos los suyos, los que la han apoyado sin fisura cuando más necesitó respaldo, y la "trouppe" se desplazó a Navalcarnero para darse un baño de masas, que eso siempre lo cura todo.
El ambiente festivo del acto quedó de manifiesto desde el primer momento. La presidenta bailando al ritmo de la versión más marchosa del himno del PP se reivindicó ante sus partidarios en el teatro de la localidad madrileña y aunque evitó cualquier referencia a los últimos "cónclaves" de Génova, sí dejó caer alguna que otra significativa frase del tipo "unas veces hemos tenido el viento a favor y otras en contra" pero "siempre estaré en primera línea".
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Como era un día para festejar, Aguirre evitó cualquier tema espinoso y se centró en los éxitos de la Comunidad durante sus años de gobierno a base de "pico y pala" y de "cumplir los compromisos". Por eso, aseguró, cada vez "nos votan más madrileños".
Sí tuvo, no obstante, palabras para el Gobierno socialista y ante un auditorio entregado aseguró que "no se puede salir de la crisis con la mentira". En este sentido, criticó "las medidas populistas, demagógicas y profundamente equivocadas" de José Luis Rodríguez Zapatero, "que no hacen más que agudizar la crisis económica" y "enmascarar las escandalosas cifras del paro".
La jefa del Ejecutivo madrileño denunció que Zapatero "no haga lo que tenía que hacer, lo que está teniendo un efecto demoledor de endeudamiento del Estado para futuras generaciones".
En su intervención, Aguirre aseguró que su Gobierno da la cara y da soluciones a los madrileños en tiempos de crisis. "Nos hemos apretado el cinturón presupuestario para administrar mejor el dinero que los madrileños ponen en nuestras manos. En tiempos de crisis, el dinero está mejor en los bolsillos de los contribuyentes. Por eso bajamos los impuestos", agregó.
Acompañada de la plana mayor del PP de Madrid, no desaprovechó la oportunidad de alabar su gestión y recordó que en estos años hay 100 nuevos kilómetros de la red de Metro, se han construido ocho nuevos hospitales, hay 24 colegios bilingües más, 20.000 plazas para dependientes, se ha reducido a 30 días las listas de espera para operaciones quirúrgicas, y se han bajado los impuestos. "Madrid es la Comunidad más atractiva para crear riqueza, empleo y prosperidad", añadió Aguirre, que recalcó que el 82% de la inversión extranjera llega a la región.
Y como fin de fiesta, de nuevo el pegadizo himno tecno del PP, todos los consejeros arropando a su presidenta, que bailaba con la mano en alto, y muchos simpatizantes y vecinos enfervorecidos espontáneamente reunidos a la puerta del teatro de Navalcarnero para despedirla al grito de "¡guapa!", "¡eres la mejor!", "¡sigue así!" o "¡qué Dios te bendiga!".
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