Electrochoques a los homosexuales chinos
Según datos preliminares, en China residen 10 millones de homosexuales.
Por Andres Bacigalupo
El homosexualismo no es enfermedad en China pero gays y lesbianas son tratados con electrochoque .
Según la agencia rusa RIA Novosti, muchos gays chinos son sometidos a terapias “eletroconvulsivas” para “curar” su homosexualidad, a pesar de que el país ya no la considera una enfermedad.
Los médicos de China siguen usando terapias electroconvulsivas con personas homosexuales, a pesar de que las autoridades sanitarias del país dejaron de considerar la homosexualidad como una enfermedad en 2001.
Las revelaciones fueron hechas en un congreso de gays en Pekín, del cuál se hace eco RIA Novosti. "Conforme a nuestros datos, la terapia electroconvulsiva se aplica a los homosexuales igual que a los pacientes obsesionados al Internet," dijo un participante del encuentro a la agencia de noticias rusa.
El informe agrega que mientras la aplicación del electrochoque en personas que quieren curar su adicción a Internet (un problema muy extendido en China) ha generado polémica, su uso en gays y lesbianas no ha dado lugar a debates públicos, porque la homosexualidad continúa siendo un tabú en el gigante asiático.
Presiones de todo tipo
"Si ya no figura en la lista, es incomprensible que en el país sigan curando a personas que no se consideran enfermas," así formularon el problema la mayoría de los participantes del congreso.
Según los expertos, la causa consiste en que las relaciones homosexuales tienen una dimensión marginal en la sociedad china, que todavía considera que se trata de una enfermedad mental.
Este fenómeno es la base de otro tipo de terapia en hospitales chinos, que se basa en presión moral a los homosexuales al hacerlos preocuparse de la dignidad de su familia. Este “método”, lamentablemente, parece dar sus frutos: un sondeo de opinión realizado en 2008 en las nueve mayores ciudades de China reveló que un 80% de homosexuales están dispuestos a contraer un matrimonio heterosexual.
Sin embargo, la evidente eficacia del tratamiento no confirma su éxito.
Los expertos afirman que la mayoría de los gays "a los que se les concideran curados" sufren depresiones crónicas, baja autovaloración e impotencia.
Según datos preliminares, en China residen 10 millones de homosexuales.