Pedro Pablo Álvarez, uno de los cuatro miembros del Grupo de los 75 a los que las autoridades cubanas obligaron a elegir en 2008 entre el exilio en España o continuar en la cárcel, acusó al gobierno español de haberlo utilizado y dijo que ha decidido marcharse a Miami, donde viven dos de sus tres hijos.
En una entrevista concedida al diario español ABC, Álvarez, quien vive en Barcelona, aseguró que, tras mediar por su liberación y la de José Gabriel Ramón Castillo, Omar Pernet Hernández y Alejandro González Raga, residentes en Madrid, el Ejecutivo español nunca regularizó su situación, por lo que no puede trabajar.
Hasta hace cuatro meses, Álvarez recibía una ayuda de 1.200 euros del gobierno español, pero eso se terminó.
"Tengo el billete para el 3 de marzo" a Miami. "Yo no puedo pagar este piso que me avaló Cruz Roja y tampoco puedo buscar otro más barato porque no tengo quien me avale", afirmó el exiliado, quien vive con uno de sus hijos y su esposa.
"Nunca nos han arreglado los papeles y no podemos trabajar. En julio de 2009, el Gobierno nos anunció que nos retiraba las ayudas, pero CiU (Convergencia i Unió) hizo presión para que me las prorrogaran hasta octubre. Pero se acabó", relató. "Para vivir así, (…) prefiero volver preso a Cuba".
De la ayuda de 1.200 euros a Ramón Castillo, Pernet Hernández y González Raga se ha hecho cargo la Comunidad de Madrid, después de que en noviembre el gobierno la diera por terminada. Los tres tienen concedido asilo político en España.
Álvarez no lo solicitó. "En un principio decidimos no hacerlo para no entorpecer la posible liberación de otros presos que quedaban en Cuba", dijo
"Yo no elegí venir a España", enfatizó Álvarez. "Yo quería quedarme en Cuba. Pero hubo un acuerdo entre dos gobiernos amigos", recordó.
Según el exiliado, el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero "sacó rédito" de su liberación y la de sus tres compañeros de cautiverio, para "neutralizar" las críticas del Partido Popular.
"Nos han utilizado. Pero si a mí no me doblegó Castro, no me va a doblegar Zapatero. No se han portado bien", dijo.
Interrogado sobre las intenciones del ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, de cambiar la política de la Unión Europea hacia Cuba durante la presidencia española del bloque, este semestre, Álvarez dijo que "suena a broma".
"No es consciente de la situación que vive mi país. No entiende lo que ocurre en un país que no conoce", afirmó.
"Si a Zapatero le preocupara de verdad la situación de los cubanos, debería luchar por solucionar los problemas que hay en mí país, sobre todo ahora que España tiene la presidencia europea. Pero el gobierno español ha malcriado al cubano porque es antiamericano", opinó