Por Natalia Eme
Ser gay no es nada fácil, como tampoco lo es ser humano, existen muchas trabas, sobretodo en un país donde te señalan por cualquier cosa, si eres chaparro, gordo, feo, divorciado, y demás, pero hablamos de palabras mayores, discriminación gay, hablamos de esa poca -si no es que nula- tolerancia hacia las personas homosexuales.
Cuando uno es gay y le es difícil abrirse ante todos, o como dicen - o decimos, salir de clóset, es aún más complicado, por que tienes que estarte escondiendo de que no sepan, que no se corra el rumor, ser discreto, no decir tus opiniones abiertamente, y es cansado, aún más que cansado es sufrible, en cuanto a que si te llegas a comparar con los heterosexuales, en cómo viven su vida puede pesar demasiado. ¿Un simple ejemplo? Cuando una pareja de heterosexuales pasean por la calle de la mano, es lo más normal del mundo, cuando lo hacen una pareja de gays, no paran las miradas, los cuchicheos, y uno que otro comentario no puede faltar, eso en el mejor de los casos, pues no es nada raro que la gente grite, humille ó hasta maltrate a los homosexuales. No, no somos unas víctimas, sin embargo, sí sabemos o conocemos más de cerca la discriminación, lo doloroso que puede llegar a ser.
Por esto es que muchos decidimos vivir en el anonimato, pasar desapercibidos, buscar un display para tus perfiles en las redes sociales y cambiarte el nombre, todo eso cansa y por supuesto, no es justo, no es justo que uno no pueda ir por la calle tomado de la mano de su pareja sin que sienta esa ola fría de la discriminación. ¿Y todo por qué? Por que hay personas que no pueden ver que tus preferencias sexuales no las eliges tú.
Así es, discriminación hay por todos lados, en la iglesia, en la política, en todos lados se ve, la doble moral ni se diga, cómo es posible que se aprueba una reforma de Ley para permitir los matrimonios de personas del mismo sexo, pero al mismo tiempo se rechaza la propuesta para la adopción, o es o no es, no hay discriminación o tolerancia a medias, al igual que el respeto, o se tiene o no, no nos andemos con doble moral, ni con medias tintas, créanme que así poco ayudamos a eliminar ó disminuir la discriminación, que finalmente, eso es lo que buscamos, ¿No?
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