Rumores sobre muerte de Castro... ¿Verdad o estrategia mediática?
Solo se trataba de un Virus cibernético lo que originó
rumores sobre muerte de Fidel Castro
Por Iliana Lavastida Rodríguez / Diario Las Américas
Desde que el 31 de julio del 2006 se dio a conocer la noticia de que por un grave estado de salud Fidel Castro cedía el poder en Cuba a su hermano Raúl Castro, los pormenores de la mejoría o empeoramiento de esa condición han sido un enigma, porque tal y como ocurrió siempre, durante los casi cincuenta años de su mandato, los detalles concernientes a su persona continuaron considerándose un secreto de estado.
Por estos días, coincidiendo con la fecha del cumpleaños 85 del ex mandatario, el pasado 13 de agosto, nuevamente el rumor de que podría haber muerto está disperso en las redes sociales y ante el hermetismo respecto al tema desde la isla, algunos medios han comenzado a dudar sobre el hecho de dar credibilidad o no al rumor.
Algunos hechos coincidentes contribuyen a otorgar un matiz de probabilidad al rumor como es el hecho de que Hugo Chávez repentinamente haya decidido no viajar a Cuba para continuar el tratamiento de quimioterapias que estaba recibiendo en La Habana, lo cual, a criterio del periodista y analista político Carlos Alberto Montaner, pudo haber sido sugerido por el propio Raúl ante la inminencia de un desenlace con su hermano, sin embargo advirtió “que sólo se trata de conjeturas, pues no tiene ninguna información precisa la respecto”.
También está el hecho de la ausencia de Castro durante las celebraciones públicas que tuvieron lugar en la isla a propósito de su cumpleaños, lo cual pudiera llevar a pensar que para entonces ya no se encontraba bien.
No obstante, tampoco hay que descartar que el manejo y manipulación de la información por el aparato de poder en Cuba es una de las principales estrategias del sistema y que ante el peso noticioso que constituye el fallecimiento de Fidel Castro, esta puede haber sido una noticia generada con toda intención para desvirtuar el interés despertado por los disímiles hechos de desobediencia civil, cada vez más numerosos entre la oposición interna, acerca de lo cual se ha manifestado en los medios internacionales que pudiera ser el comienzo de un movimiento popular en Cuba.
De cualquier manera, cuando la muerte de Fidel Castro ocurra, debido a la férrea censura informativa existente, los cubanos de la isla serán los últimos en saberlo y desde una perspectiva internacional, la noticia deberá circular cuando el régimen considere que darlo a conocer no afectará su intereses por la connotación de símbolo de poder que para aquel gobierno tiene la figura de Castro.