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General: Gloria Estefan,..De Cuba nada espero
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Resposta  Missatge 1 de 2 del tema 
De: cubanet201  (Missatge original) Enviat: 19/11/2011 16:31
 
«De Cuba nada espero. Si desean mi ayuda, que me digan cómo»
La cantante abandona su retiro y regresa a la música con el álbum «Miss Little Havana»
 
 «De Cuba nada espero. Si desean mi ayuda, que me digan cómo»
 
 Por ISABEL GUTIÉRREZ
Una tarde de 1978, en Lugo, una recién casada Gloria Estefan se recuperaba del jet-lagtomando sorbitos de café en la cocina de una tía de su marido. «Emilio y yo acabábamos de iniciar nuestro viaje de novios en España. Estaba helada y me senté en una mesita con brasero. Me quedé dormida y se me quemaron los pies. ¡Señor, qué frío! Recuerdo a todo el mundo con los cachetes rojos, hasta a mí se me pusieron colorados. Pero, ¡qué bien comí!», recuerda.
 
Cuando regresó a nuestro país, años después, su tránsito por Miami Sound Machine ya la había consagrado como la reina del pop latino y en uno de los símbolos del exilio cubano en Miami (abandonó Cuba cuando era un bebé). Desde entonces y hasta ahora, median 90 millones de discos vendidos, siete premios Grammy y una rutilante carrera a la que acaba de reengancharse con un disco casi artesano llamado «Miss Little Havana», una de cuyas canciones dedica a quienes llama los «oprimidos». «Son aquellos que trabajan duro para tener una vida más tranquila y gozosa. Ellos, los pobres, disfrutan de la música igual que el millonario», explica.
 
—¿Usted se sintió «oprimida» alguna vez?
 
—Claro, como lo fueron mis padres. Aquí los cubanos, recién llegados de la isla, trabajábamos de todo: de la tomatera al bar. Mi papá (fue guardaespaldas en tiempos de Batista) comenzó limpiando los baños de un local. El pobre le dijo a mi madre que iba a ganar 50 dólares a la semana. Y mi madre, desconfiada, le preguntó: «¿Seguro?» Pero en realidad eran 15 (cambió fifteen por fifty). Cuando uno llega de nuevas, suele empezar por lo más bajo hasta que logra su gran oportunidad... Pero ver todo lo que está pasando con la inmigración en Estados Unidos es terrorífico.
 
—¿Todo esto ya se lo ha contado a sus hijos, Nayib y Emily?
 
—Sí, recordar a veces no es divertido, pero siempre resulta saludable. Mis hijos han tenido una vida fácil y bendecida, y saben que los privilegios están para compartirlos. Puedes darles discursos hasta que te pongas azul, pero si ven que dices una cosa y haces la contraria, no cuela. Ellos siempre me han visto ayudar a otros que no tienen tanto.
 
—¿Qué espera de Cuba?
 
—De Cuba no espero nada. Llevamos 52 años esperando y mira tú como está. Lo que sea bueno para ellos, bueno será para mí. Yo creo que los cambios llegarán cuando allí se consoliden las redes sociales, pero que sean como ellos quieran. Yo a Cuba no quiero ganarle nada, ni restarle nada... Si desean mi ayuda, que me digan cómo. De momento, que no pierdan la fe.
 
—¿Convive bien con internet?
 
—Internet es estupendo para el consumidor y pésimo para cualquiera que haga un producto intelectual. La gente se ha acostumbrado a que todo sea gratis y que nada sea robo. La música ya no es negocio. Pero ¿qué puedo hacer yo?
 
—De momento, ha puesto a bailar a sus seguidores...
 
—Es mi receta contra la crisis.
 
—¿Cómo le afecta?
 
—Gracias a Dios, nosotros diversificamos hace tiempo. Pero no era cuestión de hacer o no hacer negocio. Yo no quería quemarme. Por ser mujer, creía que mi vida profesional sería corta. Al final no ha resultado así, pero no deseo la presión de antes. A mí no me gusta viajar, ya pasé quince años de mi vida de gira y fue duro. Ya basta.
 
—¿Ni siquiera vendría por aquí, tal como hizo en el 78?
 
—Volvería a Lugo y a Pola de Siero (Asturias), donde tengo un familión. ¿Sabe que fue allí donde aprendí a empinar la bota?
 


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Resposta  Missatge 2 de 2 del tema 
De: cubanet201 Enviat: 19/11/2011 16:32
Un 'wepa' por Gloria Estefan

 
 Gloria Estefan vuelve después de cuatro años sin sacar disco para re afianzar su trono en la pequeña Habana, como se conoce a la zona de Miami donde residen la mayoría de los exiliados cubanos. Wepa es el primer single de Miss little Havana que saldrá a la venta el próximo 29 de noviembre.
El tema trata de ser “un canto a los oprimidos”, esos que para Estefan: trabajan todo el día y bailan por la noche y si no llega mañana, qué más da. Pero como ya pasó con Cuba libre, el mensaje reivindicativo se diluye entre estribillos fáciles en inglés y español –merengue in the streets / todo el mundo a moverse con el ritmo de south beach- y estrofas en francés para sorpresa del exilio cubano –il y a de l´amour dans l´aire- repite la diva cubana en un peculiar acento. Tal vez, la parte más sorprendente llega pasado el ecuador de la canción, cuando Gloria Estefan convierte su canto en una especie de grito guerrero: Arre pote pote, arre pote pote pa.
 
Y todo esto en un videoclip que en unos cuatro minutos aglutina todas las tendencias audiovisuales de los últimos años. Estefan ha tratado de absorber las enseñanzas de las nuevas divas del pop.  La cantante se cambia tantas veces de vestuario como en los mejores vídeos de Beyoncé o Rihanna, con menos acierto incluso que la extravagante Lady Gaga. Estampados de topos y cardados más propios de los noventa, o los fondos de calles en movimiento y sus juegos de luces, que tantos videoclips inspiraron a principios del 2000: Madonna, Spice Girls,…
 
A su alrededor, jóvenes bailarines en vaqueros y zapatillas grandes bailan una mezcla de breakdance y salsa que apuntillan dos raperos, accesorio imprescindible en estos tiempos en los que sin featuring parece que no eres nadie. Estos dos jóvenes latinos que acompañan a Gloria Estefan no están rotulados en el vídeo. Los títulos de crédito se los lleva, una vez más, el omnipresente Pitbull, con el que Estefan ya ha grabado una versión de Wepa.
 
Una última duda nos perturba. ¿Quién es esa chinita sentada en un café con sus dos zapatos blancos y sus medias al revés que aparece en mitad de la canción?


 
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