Una prueba dura la que enfrentó william Levy este lunes 9 de abril en la edición de 'Dancing with the Stars' de ABC. El autodenominado 'Team Fuego' parecía iniciar con fuerza la coreografía, pero se fue debilitando más y más en la medida que avanzaba, al punto de un grave error cuando Burke debía de hacer un movimiento circular entre las piernas del galán, el cual no pudo concretarse y que se apreció claramente en cámara.
El jurado no llevó la crítica a la altura de los errores cometidos, es más se nota que ya siente una simpatía por la pareja y especialmente por el guapo cubano, pero sí les alertaron, y especialmente a Cheryl Burke, que a la altura de bailarina que es, se ha dejado confiar en el talento natural que tiene Levy para el baile. Pero esta noche, no brillaron, sin lugar a dudas.
La votación fue de dos siete y un ocho. Levy y Burke acumularon 22 puntos. El Jive no fue el número de éxito para el equipo de fuego.
Llevamos cuatro semanas siendo testigos de una peculiar contienda en la que los concursantes de “Dancing with the stars” se afanan en convencer a jueces y televidentes de sus virtudes danzarias, poniendo sobre las tablas todo el talento y la fuerza que llevan dentro, así como lo aprendido en las interminables horas de ensayo que habitualmente emplean, en compañía de sus parejas profesionales. Esta ha sido, hasta hoy, la tónica de tan afamado programa de televisión, y la noche de este lunes no podía ser una excepción.
En una jornada dedicada especialmente al Rock, como homenaje a ese mítico género musical, comenzaba a palparse una suerte de reto para los 10 participantes que aún permanenecen en el concurso. Los atuendos de los artistas, los temas musicales seleccionados para bailar y la parafernalia típica de una cultura marcada por sus raíces británicas y norteamericanas, hacían presagiar una nueva velada repleta de emociones.
Pero si dura se presumía para todos la tarea de representar su mejor actuación, más difícil lo sería para el actor cubano William Levy, un joven oriundo de una cultura diametralmente distante del Rock y nada afín con los canones estéticos del entretenimiento anglosajón. Aún así, Levy supo tirar de su raza y simpatía para lograr defender airosamente una rutina que parecía atragantársele en escena, lo que puede atribuirse, principalmente, a la complejidad de la coreografía propuesta por su pareja de baile, Cheryl Burque. Asesorado por la leyendas del Rock, Michael Starr (cantante) y Satchel (guitarrista), miembros de la banda Steel Panthers, Levy volvió a conquistar al público presente en el auditorio de Los Angeles, con su hechizo y el encanto que emana de su ascendecia latina, consiguiendo arrancar, otra vez, uno de los aplausos más entregados de la jornada.
Ni la osadía inesperada del futbolista Donald Driver o la lozanía del joven actor Roshon Fegan, parecen suficientes para poner en riesgo la carrera del artista cubano hacia el trono de la celebridad televisiva en los Estados Unidos. Sólo la cantante de ópera británica Katherine Jenkins continúa luciéndose como contendiente principal a tener en cuenta por Levy, lo que no está nada mal para quien ha confesado no haber “escuchado mucha música Rock en su vida”.
Esta noche, durante la ronda de eliminaciones, tendremos otra oportunidad de comprobar, por que los productores de la BBC Worldwide, no se equivocaron al seleccionar a William Levy para integrar el elenco de tan exclusivo show televisivo.