Sarah Moreno
Para la mayoría, a William Levy lo ha consagrado su participación en la presente edición de la competencia de baile televisiva Dancing with the Stars, de la cadena ABC. Sin embargo, la prueba de que alguien es una celebridad es que donde quiera que vaya, lo siguen los paparazzi.
En la actualidad, Levy no puede almorzar en un restaurante de Beverly Hills sin que lo capten las cámaras. Su imagen musculosa ocupa las páginas de las revistas del corazón y los sites de noticias en inglés y en español junto a estrellas como Brad Pitt, Zac Efron, Gerard Butler y Ashton Kutcher. En abril, estuvo en la portada de People en inglés y ya es casi presencia constante en los programas del canal de noticias del show business E! Entertainment. Todo eso sin olvidar que cuenta con un ejército de seguidoras que lo espera en las afueras del estudio en Los Angeles para pedirle un autógrafo.
Pero esto no sería suficiente para decir que el actor cubano –que llegó a Miami en 1995– ha hecho el crossover al mundo anglo si no supiéramos por aquellos que se encuentran cerca de él que le llueven las ofertas para hacer cine y televisión, en la meca de la industria en inglés, por supuesto.
A Levy, de 31 años, lo han acompañado en esta escalada hacia la fama varios factores. Uno de ellos es su perseverancia: cuentan también sus allegados que baila con un tobillo lesionado y que aún así no ha dejado de tratar de seguirle el paso a su pareja, la bailarina profesional Cheryl Burke.
El apellido, cortesía de su abuelo materno que era de origen judío, ha sido otro tanto a su favor. Es difícil imaginar que hubiera llegado tan lejos, si se llamara Guillermo López o, peor aún, si le hubieran puesto uno de esos impronunciables nombres con “y” con que dotaron a muchos que como él nacieron en Cuba en la década de 1980.
También ha redundado en su beneficio el dominio que tiene del idioma inglés. Levy llegó a Miami hace 17 años cuando tenía 14 e hizo sus estudios secundarios en esta ciudad. Luego comenzó a estudiar administración de empresas, hasta que se inclinó por el modelaje y la actuación. Siendo ya una estrella de telenovelas, siguió tomando cursos de actuación –y posiblemente de reducción de acento– para continuar su carrera en inglés. Este detalle lo diferencia de otras figuras latinas procedentes de Miami como Sofía Vergara, que ha convertido su acento en inglés en la marca distintiva de “Gloria”, su personaje en la serie cómica Modern Family (ABC).
Un gran empujón, sin duda, le dio el video musical que filmó con Jennifer López el año pasado. Levy fue el interés romántico de la estrella en su tema I’m Into You, cuyo rodaje coincidió con el anuncio del fin del matrimonio de López con Marc Anthony. Levy manejó los rumores con inteligencia y no emitió ningún comentario que lo ligara sentimentalmente a la Diva del Bronx. Se limitó a dejarse ver en la televisión estadounidense y a no contestar ninguna pregunta sobre el tema. Esta atención de la prensa de seguro pavimentó el camino para su elección como participante en DWTS.
Todo esto, sin embargo, no será nada si no toma las decisiones correctas después del fin de la competencia. Si resultara ganador, junto a Burke, empezará de verdad la carrera de Levy, que debe probar que sabe actuar, especialmente en inglés, su segundo idioma.
Para este nativo de Cojímar, un pequeño poblado marítimo en las cercanías de La Habana, comenzaría entonces su verdadera batalla con la fama. Hasta ahora ha demostrado ser un hombre sencillo, apegado a sus raíces, que no ha tenido a menos reconocer en los medios estadounidenses que pasó hambre en la Cuba de su infancia. El reto será mantener los pies en la tierra y elegir los roles que le permitan demostrar que es mucho más que músculos y un rostro
atractivo.
Ese sería el verdadero triunfo, que abriría puertas a una generación de artistas hispanos no nacidos en Estados Unidos. Su carrera sería un hito importante en el camino hacia el crossover que inició hace tres décadas otra miamense, Gloria Estefan.•