El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, asumiría temporalmente la presidencia del país en espera de la realización de nuevas elecciones en las que el actual vicepresidente, Nicolás Maduro, sería el candidato del chavismo si se llega a concretar un plan orquestado desde La Habana con una amplia participación del régimen cubano, dijeron fuentes cercanas a la situación. El plan, cuyos detalles habrían sido ultimados esta semana en Cuba, esboza el ordenamiento interno dentro de las filas del chavismo ante la expectativa que el presidente Hugo Chávez no estará en condiciones de asumir un nuevo mandato debido al avanzado estado del cáncer que padece.
Chávez, quien se encuentra en La Habana tras ser sometido a una difícil operación quirúrgica, enfrenta una situación médica díficil, según el ministro de Información Ernesto Villegas, quien el jueves en la noche anunció que el mandatario ahora sufre de una “insuficiencia respiratoria” producto de una “severa infección pulmonar”.
Una de las fuentes consultadas informó que los preparativos de la transición comenzaron meses atrás bajo la planificación del propio Chávez —cuyo estado de salud es desconocido por la inmensa mayoría de los venezolanos— y que ahora sólo se están concretando los puntos finales.
Otra de las fuentes, que tuvo acceso a la información de las reuniones en Cuba, indicó que el régimen de Raúl Castro ejerce gran influencia sobre las decisiones que se están tomando en este momento. Las fuentes hablaron con El Nuevo Herald bajo condición de anonimato.
“Los auspiciantes cubanos trabajan tras bastidores para tratar de crear una especie de politburó, un consejo que opere en consenso y que garantice la estabilidad del chavismo en Venezuela al unir a potenciales herederos y rivales”, comentó una de las fuentes que tuvo acceso a la información en Cuba.
“Los cubanos quieren que Nicolás Maduro asuma [eventualmente] la presidencia, que sea él el que encabece ese consejo, y que sirva de mediador entre las diferentes facciones y personalidades [del chavismo]”, sostuvo la fuente.
Pero los arquitectos de la transición consideran poco conveniente que Maduro llegue de inmediato al Palacio de Miraflores, debido a que la Constitución venezolana establece que el presidente de la Asamblea Nacional es quien debe asumir las riendas del poder en caso de que el mandatario electo no esté en condiciones de asumir su nuevo período.
Para tratar de evitar un deterioro de la legitimidad del chavismo, los arquitectos del plan proponen que la presidencia sea asumida interinamente por Cabello, quien debería convocar en poco tiempo a una nueva elección presidencial, con Maduro como candidato del oficialismo.
La fuente reveló que esa estrategia genera preocupación en Cuba debido a que Cabello ha acumulado mucho poder en los últimos años y representa a un sector más bien nacionalista dentro del chavismo con escasos vínculos con la revolución cubana.
No obstante, los diseñadores del plan consideran que Cabello en este momento es indispensable para la sostenibilidad del chavismo en una era post Chávez, debido a que mantiene gran influencia entre los militares.
“Bajo el plan discutido en La Habana, Diosdado Cabello seguirá siendo el jefe de la Asamblea Nacional y se le brindarán poderes adicionales e influencia”, subrayó la fuente.
“En la agenda cubana también está un esfuerzo para manejar a miembros claves del círculo de Chávez, fuera del centro federal, que han ganado batallas electorales por su propia cuenta y ahora están en posición de controlar las maquinarias del partido socialista en sus regiones, además de acumular poder regional en sus bases”, comentó.
Entre estos gobernadores de interés están el ex ministro del Interior y ahora gobernador de Aragua, Tarek El Aissami, el ex ministro de Defensa y ahora gobernador de Trujillo, Henry Rangel Silva, y el hermano del presidente y gobernador del estado Barinas, Adán Chávez.
Se desconoce si Chávez está en este momento participando en los planes de transición en momentos en que los pocos datos brindados por el gobierno sobre su salud son poco alentadores.
Villegas dijo el jueves que el mandatario sufre de serias complicaciones.
“Tras la delicada cirugía del pasado 11 de diciembre el comandante Chávez ha enfrentado complicaciones como consecuencia de una severa infección pulmonar. Esta infección ha derivado en una insuficiencia respiratoria que requiere del comandante Chávez un estricto seguimiento del tratamiento médico”, dijo Villegas el jueves en un comunicado leído en cadena de la televisión oficial.
“El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela reitera su confianza en el equipo médico que atiende al comandante”, añadió.
Desde que fue intervenido, Chávez no ha aparecido en público ni ha circulado ninguna foto de él.
Los planes de transición también establecen la necesidad de tratar de reducir los diferentes frentes de conflicto que podrían presentarse al nuevo régimen, planteando la posibilidad de establecer líneas de entendimiento con la oposición para tratar de mantener la estabilidad política, amplió la fuente que afirmó que Chávez comenzó a preparar la transición desde hace meses.
“Si el pilar fundamental de esa revolución ya no está, ellos necesitarán un pacto de gobernabilidad. Si ellos tienen que comprar voluntades dentro de la oposición, lo van ha hacer”, amplió la fuente.
Esa necesidad de pactar con la oposición se produce en medio de las previsibles dificultades económicas que enfrentará el país este año.
La fuente declaró que es por ello que se le pidió al actual ministro de Economía y Finazas, Jorge Giordani, que no renunciara para que su equipo económico inicie una serie de esfuerzos para tratar de renegociar las abultadas deudas que el régimen ha contraído con China.
“Lo que se busca es tratar de negociar con los chinos para que el servicio de la deuda no acentúe la crisis económica. Van a tratar de lanzar un par de emisiones de bonos, recoger liquidez y poder ampliar las misiones por un período de un año”, comentó la fuente.
Ese esfuerzo para mantener las misiones, y en particular la Misión Viviendas, que mantiene ilusionada a buena parte de la base chavista, cobraría gran importancia en las aspiraciones de Maduro de salir electo en los venideros comicios.
“Ellos les van a pedir a los chinos un estado de gracia para poder inyectar liquidez y mantener la estabilidad, amenazándoles que si no hay estabilidad van a perder el chivo y el mecate”, señaló la fuente.
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