Aprendí que los amores pueden terminar en una noche. Que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos. Que desconocidos pueden volverse mejores amigos. Que nunca terminamos de conocer a una persona. Que el "nunca más" nunca se cumple y que el para siempre, siempre termina. Que el que quiere lo puede, lo logra y lo consigue. Que el que arriesga no pierde nada. Que el físico gusta, pero la personalidad enamora.
Aprendí que quien no te busca no te extraña y quien no te extraña, no te quiere. Que la vida decide a quién deja entrar, pero tú decides quien se queda. Que la verdad duele una sola vez y la mentira duele siempre. Por eso, valora a quien te valora y no trates como prioridad a quien te trata como una opción.