Noventa años cumple este febrero una de nuestras más grandes y completas artistas. Para Rosita Fornés, ningún homenaje será suficiente por su larga y fructífera carrera pero, sobre todo, por su entrega, respeto y dedicación al arte. La Oficina del Historiador de la Ciudad junto al Teatro Lírico Nacional han preparado un homenaje por este significativo onomástico para reverenciar a la gran vedette de Cuba. La Sala Avellaneda del Teatro Nacional acogerá esta única función, que se celebrará el próximo 2 de febrero a las 8 y 30 de la noche.
Con dirección artística y general de Alfonso Menéndez, esta gala tendrá como características especiales transitar por obras y momentos de zarzuelas y operetas que la Fornés ha distinguido con su actuación a lo largo de toda su vida. Además de que la mayoría de las interpretaciones la realizarán jóvenes talentos del Teatro Lírico Nacional – graduados hace solo uno o dos años, algunos provenientes del coro; todo un reto para sus carreras –, junto a la participación especial de otros consagrados como Lourdes Torres, María Eugenia Barrios, Milagros de los Ángeles Soto y Lourdes Libertad, por solo mencionar algunos.
En declaraciones a la prensa, Menéndez apuntó que será una oportunidad única para estos jóvenes, pues algunos de ellos debutan, la mayoría, en como solistas: “Esto implica mucho trabajo; estamos ensayando muy fuerte desde hace varias semanas. Pero todos tienen muchas ganas de actuar por el compromiso que representa interpretar temas que hizo únicos nuestra Rosita, y les puedo asegurar que cantan muy bien”.
El también director del Anfiteatro del Centro Histórico de La Habana expresó la gran satisfacción que representa para él organizar un concierto homenaje a la figura de la escena cubana con él quien debutó en el año 1984: “La primera vez que yo puse un pie en el escenario fue con ella. La primera vez que mi nombre apareció en una reseña de un espectáculo fue con ella.
La primera vez que recibí un premio fue con «La casa de Bernarda Alba», que la monté con ella. La primera vez que recibí un regaño porque me lo merecía, fue de ella. Por todo esto, y por muchas razones más, Rosa para mí es muy importante. Lo que he hecho, lo que pueda hacer y adonde pueda llegar se lo debo absolutamente a ella. Yo jugaba mucho, hace treinta años, con la siguiente broma y le decía: «Rosa, yo los noventa se los voy a celebrar». Se ha convertido en realidad. Y así va a ser”.
Nuestra gran vedette confesó el gran cariño que siente por el Teatro Lírico: “En él me formé. Yo estudié actuación, canto, música, hasta un poco de baile; pero de todos los géneros –dramático, grandes comedias, teatro de revistas- pero el lírico es el que he interpretado con más cariño precisamente porque no pensé que pudiera llegar a hacerlo”.
“Mi trabajo siempre lo disfruté enormemente. Lo he hecho con mucho amor y a él me he entregado, desde niña siempre tuve claro que quería ser artista. Doy gracias a la vida por todas las cosas bonitas que he logrado en mi carrera. He tenido la suerte de trabajar muy intensamente y eso ha sido mi mayor placer”, declaró también Rosita. Inolvidables selecciones de obras como “La viuda alegre”, “La casta Susana”, “Las musas latinas”, “Luisa Fernanda”, “Las leandras” y otras que ha hecho suya la Fornés, podrán ser disfrutadas en este encuentro, una salutación más que merecida a quien ha entregado todo por y para su público.