Se casaron en noviembre de 2013. Él era ingeniero en prácticas. Ella, dentista. No se querían, su matrimonio había sido concertado por sus familias, algo habitual en India. Menos de un año después, él ha sido detenido por tener relaciones sexuales con otros hombres a raíz de una denuncia puesta por su esposa. Ésta es la historia.
Desde el primer momento de la relación, esta mujer de Bangalore, al sur de India, tenía dudas acerca de su nueva pareja impuesta. Durante los seis primeros meses vivieron separados por cuestiones de trabajo. Él, en Mysore. Ella, en Bangalore. Tras esa etapa pasaron a compartir techo, pero no habitación. A ella le parecía extraño que su marido no quisiese tener relaciones sexuales. "La esposa comenzó a sospechar acerca de su comportamiento porque él no tenía relaciones físicas con ella", dijo a la BBC el comisario de policía de la ciudad sureña, Sandip Patil.
Ella apunta otras señales. "Fue el brillo de labios de color rosa lo que primero despertó mis sospechas. Lo usaba todos los días y se maquillaba. Sus gestos eran femeninos", dijo la dentista al diario local 'Bangalore Mirror'. "La primera vez que hablé con él y le aconsejé que se hiciese un examen médico, pensando que no quería intimar conmigo porque era impotente, se negó rotundamente".
Entonces acudió a hablar con sus suegros para contarles la situación. Según relató a la policía después, la mujer quedó sorprendida cuando los padres de su marido la culparon por no atraer a su hijo.
Cámaras ocultas en su casa
Las suposiciones de esta joven acerca de los gustos de su cónyuge crecieron cuando empezó a ver que su marido traía a hombres a casa cuando ella no estaba. Más adelante, sin decírselo a nadie, decidió colocar cámaras ocultas en las habitaciones y en la cocina de su casa.
Después de irse a pasar unos días con sus padres, vio las grabaciones y descubrió que su marido tenía relaciones sexuales con otros hombres. "La esposa puso cámaras en la casa, recogió pruebas sobre el sexo antinatural y presentó una denuncia ante la policía. Lo hemos arrestado", señaló el agente Patil.
Ahora, el ingeniero de 32 años está detenido, acusado de quebrantar el artículo 377 del Código Penal indio, un artículo que ha generado mucha polémica los últimos cinco años. El texto, basado en una ley del imperio británico, apunta que será castigado "quien quiera que voluntariamente tenga relaciones carnales contra el orden de la naturaleza con cualquier hombre, mujer o animal". Eso incluye las relaciones entre personas del mismo sexo. La pena máxima contemplada para este delito es la cadena perpetua.
En diciembre de 2013, el Tribunal Supremo indio echó por tierra un veredicto que anulaba esa ley, por lo que las relaciones homosexuales volvieron a ser ilegales en India tras un paréntesis de legalidad que había durado cuatro años. Esa decisión llevó a numerosas protestas en las principales ciudades del país.
A pesar de que el artículo 377 está en vigor, raras veces se detiene a alguien por mantener este tipo de relaciones. "Creemos que éste es uno de los primeros casos que surgen bajo esta sección después del veredicto del Tribunal Supremo el año pasado", le dijo Patil a la cadena británica.
La mujer también ha denunciado a sus suegros. "He acusado a mis suegros de engaño porque creo que sabían que su hijo era gay, pero intencionadamente me llevaron a creer que no lo era. Me han engañado y me han arruinado la vida por conseguir que me casara con él". Los matrimonios concertados siguen siendo comunes en India, donde las personas se casan por presiones sociales y familiares. Muchas veces, los novios no se conocen hasta la boda y en otras tantas ocasiones, cuando se casan, descubren que su pareja concertada no es el amor de su vida.
Ahora falta ver qué le sucederá, porque la India prohíbe las relaciones homosexuales por una ley que proviene del Imperio Británico.
Tema anterior
Primer 