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De: cubanet201 (Mensaje original) |
Enviado: 05/04/2015 15:45 |
Grupos opositores cubanos se unen ante la Cumbre de las Américas El encuentro está marcado por la nueva etapa en las relaciones entre EEUU y Cuba Varias organizaciones opositoras llevarán un mensaje conjunto bajo el lema 'Yo soy Cuba'
El opositor cubano Manuel Cuesta Morúa, uno de los responsables de la iniciativa.
Por Carolina Martín Adalid / Nueva York / Especial para "Yo soy Cuba". Es el lema de varias organizaciones opositoras cubanas, que quieren llevar un mensaje unitario a la VII Cumbre de las Américas. Una cita que arranca el 10 de abril en Panamá, a la que asistirán los principales mandatarios del continente y que está marcada por la nueva fase del deshielo en las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba.
La reunión es histórica por este nuevo escenario, principalmente, y por la presencia anunciada del presidente estadounidense Barack Obama y el líder cubano Raúl Castro, que se verán en Panamá cara a cara, tras la conversación telefónica mantenida para cerrar el acuerdo que desencadenó el restablecimiento de las relaciones entre ambos países.
Con la cumbre en el horizonte varios grupos opositores como elFrente Antitotalitario Unido, el Partido Arco Progresista de Cubao la Unión patriótica de Cuba han redactado un mensaje conjunto con el que pretenden que América "reconozca la legitimidad de la sociedad civil cubana independiente dentro de la isla y en la Diáspora como interlocutora del pueblo cubano". Manuel Cuesta Moruaexplicó a la agencia Efe que más de una decena de organizaciones detrás de la iniciativa, que "cubren todo el espectro político", están detrás de la iniciativa.
Incompatibilidad democrática Estos grupos también desean alzar la voz en el foro para recordar que "la plena inserción del gobierno cubano en el sistema interamericano es incompatible con los postulados de la Carta Democrática interamericana".
Según señalan en el documento, esa incompatibilidad procede de la "represión" en Cuba de los derechos de expresión, reunión, asociación y manifestación; de la existencia de prisioneros políticos y de conciencia; del hostigamiento permanente al naciente sector de emprendedores; la falta de voluntad para ratificar los pactos de Naciones Unidas; la existencia de un partido único que impide la alternancia en el poder; o al imposibilidad de que el pueblo elija entre alternativas políticas.
En definitiva, la falta de una democracia representativa pluripartidista. En el mensaje unitario que dieron a conocer este viernes en rueda de prensa, las organizaciones civiles que entonan "Yo soy Cuba" se comprometen a trabajar conjuntamente para que "Cuba regrese como nación libre y soberana a un entorno hemisférico donde prevalezcan la democracia y el respeto institucional de los derechos humanos y las libertades fundamentales".
La próxima semana Cuesta llevará estas demandas a Panamá. Pero no estará solo. Con él acudirá otro de los firmantes en representación del Frente Antitotalitario Unido, Guillermo Fariñas. Y aunque el líder de la Unión Patriótica de Cuba, José Daniel Ferrer, no podrá asistir (por ser uno de los presos liberados en 2010 del Grupo de los 75), si lo harán otros miembros de la organización.
Entre la disidencia que firma este mensaje no se encuentran laDamas de Blanco. Cuesta informó a la agencia Efe que no habían podido hablar con la líder de la organización, Berta Soler, porque estaba fuera del país. Esta previsto que ella también acuda a la Cumbre de las Américas.
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Cumbre de las Américas:
Raúl Castro y los opositores a un mismo foro
POR NORA GÁMEZ TORRES Los jefes de estado y de gobierno del hemisferio se reunirán a finales de la próxima semana en la VII Cumbre de las Américas en Panamá, en un encuentro que muchos creen será acaparado por la participación de Cuba en el marco del proceso de normalización de relaciones de la isla con Estados Unidos.
Cuba aceptó la invitación del gobierno panameño para participar en la cumbre, que se realizará el 10 y el 11 de abril, en lo que sería la primera vez que el presidente estadounidense, Barack Obama, y el gobernante cubano Raúl Castro, compartan un mismo foro político después del anuncio del 17 de diciembre.
Que se conozca públicamente hasta ahora, los dos mandatarios solo intercambiaron saludos en el funeral de Nelson Mandela y conversaron telefónicamente por 45 minutos para sellar el acuerdo de restablecer relaciones que cambió la historia de los nexos entre ambos países.
“Al estar Cuba en la cumbre por primera vez, obviamente va a robar una gran cantidad de atención”, dijo Roberta Jacobson, secretaria de Estado adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental, durante una vista previa de la cumbre en la Institución Brookings el viernes. “Eso elimina una enorme irritación de nuestra nuestra política para América Latina”, añadió.
Y aunque los medios estarán pendientes de la interacción de ambos –Jacobson dijo que esto sucederá, sin dar más detalles–, la Cumbre será también escenario de otro encuentro sin precedentes: por primera vez, opositores, activistas por los derechos humanos y artistas contestatarios compartirán un mismo espacio con miembros de organizaciones políticas, estatales y “de masas” gubernamentales en actividades paralelas a la reunión de mandatarios. El coordinador del Foro de la Sociedad Civil y Actores Sociales de la Cumbre, Rubén Castillo, dijo a el Nuevo Herald que en el encuentro, “van a estar representados la disidencia cubana y los demás grupos de la sociedad civil de Cuba. Vamos a hacer un esfuerzo para que todo el mundo tenga una representación y hagamos un debate de altura”, agregó.
La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC), la Fundación Nacional Cubano Americana y la Cuban Soul Foundation (CSF) informaron que llevarán una delegación de “19 líderes cívicos independientes, activistas de derechos humanos, periodistas independientes, blogueros, artistas y músicos alternativos todos con domicilio en la isla”.
Entre los panelistas de un evento sobre derechos humanos de la FHRC, en colaboración con CSF y la sede en Panamá de Universidad Estatal de La Florida (FSU Panamá) a celebrarse el ocho de abril, se encuentran los de Manuel Cuesta Morúa, Guillermo Fariñas y Berta Soler que participarán junto a blogueros, raperos, periodistas y artistas independientes.
Según los organizadores panameños del Foro, se espera que asistan alrededor de 30 representantes de la oposición y la sociedad civil independiente pero las listas oficiales de invitados no se han hecho públicas, por temor a que el gobierno cubano obstaculice su participación en el evento, como lo ha hecho con el activista por los derechos humanos Antonio Rodiles, a quien las autoridades cubanas le confiscaron su pasaporte.
“¿Por qué impide que un grupo importante de cubanos pueda viajar a Panamá? ¿por qué impone limitaciones a nuestras libertades de movimiento?”, cuestiona Rodiles en una carta abierta a Raúl Castro y agrega:
“Le escuché decir que la ‘sociedad civil’ cubana irá a desenmascarar a los mercenarios y sus patrones, vuelvo a recordarle que usted, su hermano y su grupo, son los mayores traidores y anticubanos y que sus voceros y represores son los verdaderos mercenarios”, agrega.
Los activistas que no podrán asistir a la Cumbre –entre ellos ex presos del grupo de los 75, como el líder de la UNPACU, José Daniel Ferrer– celebrarán en varias provincias una “Cumbre paralela”.
La mayoría de las organizaciones opositoras dentro de la isla –como el Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel, Arco Progresista, el Frente Antitotalitario Unido, la Unión Patriótica de Cuba, Ciudadanas por la Democracia y el Comité Ciudadanos por la Integración Racial (CIR)– consensuaron un documento para llevar un “mensaje unido” a la Cumbre, con propuestas de una nueva ley electoral y de asociación.
“Es claro que una sociedad civil vigorosa solo es posible donde se les reconoce independencia a sus ciudadanos y se les respeta sus derechos y libertades fundamentales. La VII Cumbre de las Américas es la oportunidad para que el hemisferio occidental reconozca la legitimidad de la sociedad civil cubana independiente dentro de la lsla y en la Diáspora como interlocutora válida del pueblo cubano”, destaca el documento.
“Es también el escenario para hacer evidente que la plena inserción del gobierno cubano en el sistema interamericano es incompatible con los postulados de la Carta Democrática Interamericana”.
Cuba aceptó la invitación del gobierno panameño para asistir a la Cumbre, por primera vez desde que su suspensión en la Organización de Estados Americanos (OEA), que data de 1962, fuera anulada en el 2009.
La prensa oficial anunció que la delegación que participara en los foros y actividades paralelas de la VII Cumbre de las Américas estará compuesta por “más de un centenar de representantes de la sociedad civil cubana: actores sociales, jóvenes, intelectuales, campesinos, cooperativistas, empresarios y académicos”.
La mayoría de estas organizaciones tienen vínculos directos con el Estado, pues la ley de asociaciones actual requiere que las ONGs tengan un organismo “de relación” estatal. Algunos de sus dirigentes son miembros del Consejo de Estado, como Ulises Guilarte, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, el único sindicato legalmente reconocido en la isla.
Según reporta el sitio oficial Cubadebate, la delegación llevará a Panamá “los mandatos y recomendaciones de la sociedad civil y la juventud cubanas” y agrega que “la delegación caribeña sabrá no solo defender sus posiciones, sino también expresar su solidaridad con los pueblos hermanos de la región”.
El estado cubano también utilizará la Cumbre para promocionar algunos de sus productos. Un reporte de la agencia Prensa Latina informa que el presidente de Cuba Ron y Havana Club Internacional S.A., Juan González Escalona, participará en la II Cumbre Empresarial de las Américas, prevista del 8 al 10 en Panamá, para promover marcas cubanas de ron así como buscar “nuevos mercados y posibles inversores”. Algo similar harán representantes de la empresa estatal Unión Cuba-Petróleo (Cupet), quienes presentarán en Panamá el potencial para la exploración petrolera de una zona marítima en el golfo de México, denominada en Cuba como Zona Económica Exclusiva.
La prensa oficial cubana por su parte, está denunciando la participación de los opositores y activistas cubanos como “provocaciones” y “complots anticubanos” organizados en conjunto con líderes de la oposición venezolana.
No obstante, voces dentro de Cuba, como las de Manuel Cuesta Morúa, líder de Arco Progresista, han insistido en que la Cumbre es una oportunidad única, que debe emplearse para aprender el lenguage “de lo civil”, “vindicar” la imagen de los opositores –a quienes el gobierno cubano presenta como “gente incapaz, algo desarrapada, sin propósito ni meta, y que solo busca un par de beneficios”– y practicar un espíritu inclusivo: “hemos sufrido en carne propia una exclusión cincuentenaria como para que paguemos con la misma moneda”.
Un mensaje similar envió la bloguera y directora del diario digital14ymedio, Yoani Sánchez, quien pidió “renunciar a la descalificación” de los miembros de organizaciones con vínculos con el estado, como la Federación de Mujeres Cubanas o los Comités de Defensa de la Revolución, que asistan a la Cumbre, por englobar a gran número de cubanos, “ya sea por automatismo, incapacidad de elegir otras opciones, miedo o verdadera complacencia”.
“Desconocerlas es amputar una parte de nuestra realidad”, subrayó en un artículo de opinión para ese medio.
Venezuela en el centro de la discordia
Pero la posibilidad de diálogo y debate entre simpatizantes y opositores al gobierno, y entre las delegaciones de Estados Unidos y Cuba, podría verse obstaculizada por otro tema de polarización: Venezuela.
Tras el reciente decreto presidencial –que acompaña a las sanciones a siete funcionarios venezolanos, involucrados en violaciones de los derechos humanos–, que califica a Venezuela como una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos, el gobierno venezolano lanzó una campaña internacional titulada “Obama deroga el decreto ya”. El objetivo es recabar diez millones de firmas, varios dentro de Cuba, que el presidente Nicolás Maduro piensa entregar a Obama durante la Cumbre.
De este modo, “la solidaridad con Venezuela ante las más recientes acciones agresivas estadounidenses” se ha convertido en una “postura fundamental” de la delegación oficial cubana a la Cumbre, según dijo uno de sus miembros, el coordinador general del Centro Memorial Martin Luther King, Joel Suárez, a Prensa Latina.
La nueva política hacia Cuba “podría haber ayudado si los Estados Unidos no hubieran impuesto sanciones en Venezuela, y no estoy diciendo que no estoy de acuerdo con las sanciones”, dijo Susan Kaufman Purcell, directora del Centro de Política Hemisférica de la Universidad de Miami .
Pero si el presidente quería mejorar las relaciones con América Latina y cosechar algún beneficio de la nueva relación con Cuba, “no entiendo el momento de esto”, dijo. “De inmediato, los países latinoamericanos condenaron las sanciones como intervencionistas”.
“Una de las cosas que hay que recordar es que la legislación había estado pendiente en el Congreso durante dos años” antes de que se abrió camino al escritorio del presidente, dijo Jacobson el viernes. “Teníamos que avanzar para enviar un mensaje” a Venezuela.
La diplomática advirtió que las “sanciones financieras universales por parte de Estados Unidos no son algo que la región apoya” por lo que se ejecutaron “sanciones muy focalizadas” y así evitar que se convirtieran en un conflicto en la Cumbre. Pero entonces, fueron “explotadas en una especie de frenesí por el liderazgo de Venezuela”.
NORA GÁMEZ TORRES
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