Los intolerantes republicanos de siempre, buscan
bloquear en el Congreso fondos para embajada en Cuba
Buscan bloquear en el Congreso fondos para embajada en Cuba
Una propuesta de ley de gastos del Departamento de Estado en el año fiscal 2016 presentada el martes en el Congreso, prohibiría el empleo de fondos para expandir la misión diplomática en Cuba más allá de las instalaciones existentes antes del 17 de diciembre.
El proyecto de ley del Estado y Operaciones en el extranjero que se utiliza para financiar los gastos del Departamento de Estado y otros programas —preparado por la Comisión de Asignaciones del Congreso— también restringe los fondos para facilitar la apertura de la embajada cubana en Estados Unidos y aumenta el financiamiento para la promoción de la democracia y el fortalecimiento de la sociedad civil en Cuba hasta los $30 millones.
Este dinero no podría emplearse en el apoyo a los “emprendedores”, la promoción de negocios o una reforma económica, en contraposición con la política delineada por el presidente Barack Obama, a partir del 17 de diciembre.
El lunes, el senador Marco Rubio ya había declarado que se opondría al nombramiento de un embajador cuando se abriera formalmente la sede diplomática en La Habana.
El proyecto de ley será discutido el miércoles en la Subcomisión de Estado, Operaciones en el Extranjero y Programas Relacionados de la Cámara baja, presidida por la representante republicana por Texas, Kay Granger.
FINANCIAMIENTO A RADIO Y TV MARTÍ
El documento prohíbe además, que fondos “de ayuda económica bilateral” sean destinados al gobierno cubano. Asimismo, mantiene el financiamiento a la Oficina de Transmisiones a Cuba, que supervisa a Radio y TV Martí, aunque prevé que esta pudiera fusionarse con la división para América Latina de la Voz de América.
David Gómez, director de política de Cuba Now, una organización que aboga por el fin del embargo y el acercamiento a Cuba, opinó que “intentar bloquear un embajador o los fondos para una embajada en Cuba, con la premisa de que estás preocupado por los derechos humanos es como negarte a ir a un dentista hasta que no estés libre de caries. Es literalmente lo último que quieres hacer si estás legítimamente interesado en resolver ese asunto”.
Para Gómez, miembros del Congreso como el representante republicano por la Florida Mario Díaz-Balart, “están tratando de deshacer los cambios de la nueva política introduciendo enmiendas regresivas en cada proyecto de ley que puedan” porque “han visto las encuestas y se han dado cuenta de que no pueden ganar en este tema en público”.
Pero Mauricio Claver-Carone, que dirige el U.S.-Cuba Democracy PAC, un poderoso comité de acción política que respalda la política de sanciones contra el gobierno cubano, dijo a el Nuevo Herald que simplemente “el Congreso está haciendo escuchar su voz” y que “abrir una embajada por el solo hecho de hacerlo no es una política”.
“El Departamento de Estado ya ha pedido $6 millones para la conversión [de la Sección de Intereses en La Habana] a embajada. Y van a necesitar más. Es importante que la administración de Obama no reciba un cheque en blanco, en particular, mientras continúan bajando los requerimientos—y haciendo concesiones—para la apertura de la embajada”, añadió.
En una declaración obtenida por el Nuevo Herald, Díaz-Balart aseguró que continuaría trabajando para “asegurar que el Congreso mantenga su solidaridad con el pueblo cubano en vez de otorgar más concesiones a sus opresores”.
LA CASA BLANCA AMENAZA CON VETAR LEYES DE GASTOS DEL GOBIERNO
La Casa Blanca, mientras tanto, amenazó con vetar el proyecto de ley de gastos del gobierno para el transporte y vivienda, que fue aprobado en mayo por la Comisión de Asignaciones del Congreso y que limita la expansión de los servicios de transporte aéreo y marítimo hacia Cuba.
La Casa Blanca criticó la propuesta presentada por Díaz-Balart—presidente de la Subcomisión de Transporte, Vivienda y Desarrollo Urbano—por hacer recortes a las inversiones en transporte, reducir “los fondos a poblaciones vulnerables” y, en general, “dañar nuestra economía”.
“Además, la legislación incluye provisiones muy cuestionables, incluyendo aquellas que restringirían los viajes a Cuba, socavan la seguridad pública y limitan las opciones locales y estatales para mejorar los trenes de pasajeros”, dijo la Casa Blanca en un comunicado sobre políticas administrativas.
Un reporte de la minoría demócrata en la Comisión de Asignaciones, que se opuso al proyecto presentado por Díaz-Balart, menciona que la propuesta de ley “intenta socavar la nueva política del presidente Obama hacia Cuba, al impedir servicios aéreos regulares y viajes de cruceros” a la isla.
La Casa Blanca dijo también que se opone “con fuerza” a la propuesta de ley de gastos de presupuesto de Justicia, Comercio y Ciencia. En este último caso, el ejecutivo señaló que el proyecto contenía “restricciones no pertinentes de política exterior relacionadas con Cuba”.
La cláusula en cuestión prohíbe el empleo de fondos para expedir licencias o promover exportaciones a “militares de Cuba o los servicios de inteligencia”.