“Cada vez que (el gobierno) aprieta el zapato, la ley le saca presión a esta isla”
Por Camilo Ernesto Olivera | La Habana, Cuba | Cubanet “¿Que van a cambiar la Ley de Ajuste?… ¿Y eso dónde lo dijeron?”
El hombre mira a este reportero, con una mezcla de incredulidad y desconfianza. Lee detenidamente lo publicado por CubaNet. La nota explica que el cubano-americano Carlos Curbelo, congresista por el Partido Republicano, está proponiendo modificar la Ley de Ajuste Cubano.
La mayoría republicana en el Congreso estadounidense podría influir en la aprobación del presupuesto para el consulado en La Habana, a cambio de que el ejecutivo de Obama sintonice con el proyecto de Curbelo.
La Ley de Ajuste, el cascabel, el gato… y el Estrecho de La Florida
Durante casi 50 años, la Ley de Ajuste Cubano ha permitido que cientos de miles de refugiados e inmigrantes de la isla que llegan sin visa puedan obtener residencia después de permanecer durante un año y un día en suelo estadounidense.
Este entrevistado pide que lo identifique solo con el nombre de Juan Carlos. Él no pierde la esperanza de que todo esto no sea más que otro rejuego político:
“Los radicales no pudieron evitar que Cuba fuera sacada de la lista de países patrocinadores del terrorismo. Esto de Curbelo es un desquite. Y no es la primera vez que intentan cambiar la Ley de Ajuste y fracasan. Aunque es verdad que el nivel de descaro es alto. Gracias a esa ley han entrado al yuma (EEUU) lo mismo delincuentes que hijos de generales en activo cercanos a Raúl Castro.”
“Esa es una Ley asesina. Es criminal eso de que te niegan la visa varias veces en la Oficina de Intereses. Luego, te la juegas en el mar y, si tocas tierra, estás ‘en talla’”, afirma en cambio Daniel Ramos, otro entrevistado. “Pero ese tipo (Curbelo) dice la verdad. No tiene lógica que tú llegues allí diciendo que eres perseguido político y, un año y pico después, regreses a vacilar al país donde, según tú, te reprimen”, añade.
Nos topamos con Alain David. Accede a ofrecer su punto de vista: “Esa parte que dice el tal Curbelo, que tienes que ser disidente para poder acogerte a la Ley de Ajuste…eso está duro…pesado, pesadísimo. Aquí si sacas un pie te lo cortan al momento. Es como querer ponerle el cascabel al gato. Todos en la calle dicen que la cosa se pone cada vez peor. Que así no hay quien viva. Que estos tipos (el gobierno) lo quieren todo para ellos y sus hijos. Pero quedarse aquí para oponerse…eso lo hacen cuatro o cinco, que están vigiladísimos por ‘el aparato’ (policía política).”
¿Se acaba la válvula de escape?
Aunque prefieren omitir sus nombres, permiten ser fotografiadas en pleno debate. Han leído la nota y:
“De este proyecto de modificación de la Ley de Ajuste no han dicho una palabra en la Mesa Redonda, al menos que yo sepa”, expresa una.
“Es que el gobierno sabe que si toca esta tecla, se le forma otro éxodo peor que el de 1994”, opina otra. “Además no hace falta que ellos lo digan. Aquí todo se sabe, mira como hay gente fugándose por México”, agrega.
“Pero se trata de si quitan la Ley de Ajuste, o la modifican. Si aprueban el proyecto de ese congresista aquí se va a formar ‘Libia 2da parte’. La gente, para que no le nieguen la entrada a EE.UU., hará cualquier cosa con tal de calificar como disidente. Lo mismo matar a un policía, pintar carteles o tirar papelitos en la calle contra el gobierno.”
¿Y la olla explota, o no?
“¿Que van a cambiar la Ley de Ajuste?… ¿Y eso dónde lo dijeron?”
El hombre, una persona mayor, termina de leer la nota publicada por CubaNet. Medita un poco antes de dar su opinión. Pide no decir su nombre:
“Si hay relaciones y embajadas, se supone que no tiene lógica la Ley de Ajuste. Súmale a eso que vienen ferris desde La Florida. La parte complicada es que, cada vez que (el gobierno) aprieta el zapato, la ley le saca presión a esta isla. Mijo, la verdad es que, sin ley de ajuste, explota la olla y una situación social inestable a 90 millas es un lío para la seguridad nacional de los americanos. Ese congresista, Curbelo, no está trabajando para que le aprueben el proyecto con Obama en el poder. Cualquier modificación a la ley de Ajuste, si la hubiese, va a prosperar de verdad cuando suba un republicano a la Casa Blanca.”
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