El sacerdote que fue suspendido por justificar la pederastia
El sacerdote italiano Gino Flaim, dio una polémica entrevista a la televisión de su país, en la que justifica la pedofilia, pero que no puede entender a los homosexuales.
La Iglesia debería estar patas arriba.
Mientras se está llevando a cabo el Sínodo de los obispos sobre la familia en el Vaticano, que abarca temas delicados, y después de que el teólogo polaco, monseñor Kristof Charamsa, se proclamó homosexual, irrumpe en la televisión italiana una controvertida entrevista que tiene a los italianos escandalizados.
La entrevista apareció en el programa L’aria che tira del canal La 7,donde un sacerdote defiende a los religiosos que cometen actos de pederastia. “La pedofilia la puedo entender, a la homosexualidad no lo sé”, dijo Don Gino Flaim, colaborador pastoral de la iglesia de San Giuseppe en Trento, a una periodista que no pudo dar crédito a lo que escuchaba. “Conozco a los niños y hay algunos que buscan afecto porque no lo tienen en sus casas. Y tal vez si encuentran a algún cura… este puede ceder. Y yo entiendo eso”, agregó.
Lo cierto es que para el cura los pedófilos no son monstruos, “las víctimas se lo buscaron”. Es más, cuando se le preguntó si los niños son la causa de estos repudiables hechos, él dice: “En gran parte sí”.
Luego, cuando se le preguntó acerca de su postura con respecto a los homosexuales, dijo lo siguiente: “Pienso que la homosexualidad es una enfermedad. El que vive en esta situación de pedofilia u homosexualidad, pienso que dentro de su ser está sufriendo. Hasta se ve diferente a los demás y busca de todas las formas posibles de expresarlo”. Flaim trabaja como colaborador pastoral y a veces da sermones a la comunidad.
A la pregunta, después, de si las acusaciones contra la pedofilia eran injustificadas, el religioso no se quedó callado y respondió cándidamente: “Acusar es un pecado y como todos los pecados deben ser aceptados. No sé exactamente si hay pedófilos en la Iglesia. Si los hay no me sorprendería, porque la Iglesia es una comunidad de pecadores. No por nada Jesús murió por sus pecados”, concluye.
Al día siguiente de que se emitió la polémica entrevista del sacerdote, se desató el caos entre los medios de comunicación italianos e internacionales. La Iglesia de Trento hizo saber de inmediato, a través de un comunicado que se publicó en la página web de la Arquidiócesis, que se “desvincula plenamente” de las declaraciones de Gino Flaim y además señaló que el sacerdote “expresó argumentos que no representan de ninguna manera la posición de la Arquidiócesis y el sentir propio de toda la Comunidad Eclesial”. Después de esto, el cura fue suspendido de la Iglesia permanentemente.