Por Eva Font / The Associated Press / New York *
Para el Nobel de Literatura peruano Mario Vargas Llosa, la designación de Donald Trump como candidato del Partido Republicano a la Casa Blanca sería un "suicidio" por sus críticas contra los migrantes mexicanos.
"Creo que sería un suicidio para el partido republicano tener a Donald Trump como candidato y, si lo tuviera, no hay la más mínima posibilidad de que ganara", dijo Vargas Llosa el lunes en la conferencia "Nuevas perspectivas sobre las relaciones entre Estados Unidos y Latinoamérica" en el Instituto Cervantes de Nueva York.
Además del laureado escritor, en la charla participaron el ex presidente de México, Felipe Calderón, y de Chile, Sebastián Piñera. El acto está dentro de la programación de la Fundación Internacional para la Libertad, que preside el propio Vargas Llosa, en el Instituto Cervantes.
Para el autor de obras como "La casa verde" o "La fiesta del chivo", Trump no tiene opciones porque Estados Unidos cuenta con una importante mayoría de migrantes, "unos 40 o 50 millones, siendo la comunidad mexicana la principal".
Vargas Llosa, que recientemente firmó un manifiesto junto a más de 60 artistas, escritores y científicos hispanos — incluidos la escritora mexicana Elena Poniatowska y el cineasta azteca Alejandro González Iñárritu — contra las declaraciones antiinmigrantes de Trump, lanzó duras críticas al magnate.
Considera que el multimillonario "no tiene posibilidad alguna de ser candidato" y que sus declaraciones polémicas "no tendrán mayor consecuencia en estas elecciones" y acusó a Trump de optar por una "línea payaso y una manifestación histriónica" que le ha dado gran publicidad a su campaña.
Para Vargas Llosa, las declaraciones contra los migrantes se contradicen con un "sentimiento profundamente arraigado" en un país, que calificó de "democrático" y "tolerante", creado a partir de la emigración.
No obstante, apuntó que el hecho de que existan comentarios como los de Trump "es preocupante" porque supone que hay " racismo".
Por su parte, el ex mandatario mexicano Felipe Calderón valoró que Trump pone de relieve el fenómeno de la supremacía "WASP" (White Anglo-Saxon Protestant, Protestante blanco anglosajón).
"Es un fenómeno que no podemos ignorar y que se ha exacerbado y tenemos que preguntar por qué se ha exacerbado hasta el punto de producir personajes como este (Trump)", dijo Calderón.
Según Calderón, "amplios estratos" de la sociedad estadounidense se ven amenazados por la presencia de la inmigración y pidió un cambio en la estrategia sobre política migratoria para permitir que los migrantes mexicanos puedan, por ejemplo, trabajar temporalmente en Estados Unidos para luego regresar a su país.
"Es importante matizar que el trabajador migratorio no viene al inicio a Estados Unidos a buscar la ciudadanía americana; tiene familia, hijos, madre, hermanos en sui país. Lo que quiere es venir unos meses, ganar dinero y volver a su tierra. Pero si se va, luego no puede volver", agregó.
"Tenemos que buscar soluciones pragmáticas que rompan este racismo y (eviten) que se multiplique esta fobia que llevó a gente como al propio Hitler al poder", dijo Calderón.
En la misma línea se manifestó el ex mandatario chileno Sebastián Piñera, afirmando que las "consecuencias de este tipo de racismo pueden ser muy severas".
También Vargas Llosa, duda que el acercamiento a EEUU genere apertura democrática en Cuba
Los expresidentes Sebastián Piñera, de Chile, y Felipe Calderón, de México, y el Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, se mostraron cautos sobre los resultados del acercamiento entre Washington y La Habana y la posibilidad de que ese proceso genere una apertura democrática en la Isla.
Vargas Llosa participó este lunes con Piñera y Calderón en un debate realizado en el Instituto Cervantes de Nueva York para analizar los vínculos de Estados Unidos con Latinoamérica, reporta EFE.
Como parte del debate, se comentó la decisión de los gobiernos de Estados Unidos y Cuba de iniciar un acercamiento diplomático en diciembre pasado, y el papel que tiene dentro de ese proceso el embargo económico aún vigente.
"El embargo no ha sido ese incentivo que se esperaba durante muchos años para que hubiera una apertura", afirmó Vargas Llosa, excandidato presidencial peruano y quien, no obstante, se mostró defensor de esas sanciones económicas estadounidenses.
Su propósito, añadió, fue acabar con el "poder totalitario" en la Isla y desalentar procesos parecidos en Latinoamérica, pero se ha convertido en un "pretexto" de La Habana para culpar a Washington de sus propias "miserias", admitió.
Sin embargo, los acercamientos entre ambos gobiernos dejan a muchos "desconcertados", porque "provocan mucha inquietud de cubanos defensores de la democracia, que ven que es una especie de oxígeno que recibe el Gobierno cubano sin hacer concesiones a la libertad", dijo Vargas Llosa.
"Mi posición es de esperanza. Ojalá que algo ocurra que mueva a Cuba en el camino de la apertura y la modernización", añadió el Nobel.
Sebastián Piñera, por su parte, dijo que ese acercamiento para los cubanos representa la posibilidad de que se levante el embargo, mientras que el propósito para Estados Unidos "y todos los demócratas" debería ser que "Cuba deje de ser una dictadura".
En su turno, el expresidente mexicano Felipe Calderón dijo que los dirigentes del Gobierno cubano "son muy astutos" porque están propiciando un acercamiento con Estados Unidos previendo "la caída del chavismo" en Venezuela, a causa de la crisis económica en este país, que está teniendo efectos en su apoyo a La Habana.
"Como Tarzán, no sueltan la liana mientras no puedan agarrar otra", le interrumpió Piñera.
Para Calderón, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, está impulsando este acercamiento con La Habana para dejar un "legado" en su gestión en la recta final de su mandato, teniendo en cuenta la relación "muy pobre" que ha tenido con Latinoamérica.
Washington también tiene como motivación lograr la paz en Colombia gracias a las negociaciones que se llevan a cabo en La Habana con las ilegales FARC, a pesar de que ese proceso "está dejando muchas dudas" entre los colombianos.