Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: Los cubanos con escasos acceso a los turistas del crucero Adonia
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: cubanet201  (Mensaje original) Enviado: 06/06/2016 13:52
Los negocios privados, con
escaso acceso a los turistas del crucero Adonia
  
Cuba Cruises (17) (640×427)
Turistas del crucero Adonia posan junto a bailarinas que participaron en un recibimiento en La Habana.  
            Jorge Enrique Rodríguez | La Habana | Diario de Cuba
El tercer arribo del buque Adonia, de la compañía Carnival, a puerto habanero, evidenció el esfuerzo del Gobierno por limitar el contacto de los turistas que viajan en él con la población y los negocios privados locales.
 
Un cordón policial, desplegado en la terminal Sierra Maestra, fue la bienvenida para los pasajeros. El recorrido por La Habana, limitado y siempre en compañía de guías, incluyó las plazas principales del casco histórico, almuerzo dirigido en el bar-restaurante Floridita y visita al museo Ernest Hemingway, en Finca Vigía.
  
"Estamos viendo cómo se evapora la construcción de esos 'puentes' entre nuestros pueblos para generar más ingresos a los pequeños negocios cubanos, como dijo Obama en su discurso", afirmó Saúl Matos, conductor de un coco-taxi.
 
"La competencia es desigual porque las agencias de turismo son controladas por el Gobierno. La Policía nos prohíbe estacionarnos en los alrededores, a pesar de existir allí una zona de piquera que nos corresponde", añadió.
 
Maikel Pozo, barman del restaurante Don Lorenzo, relató que a finales de abril el gerente reunió a todos los trabajadores para avisarles "de que todo servicio tenía que ser impecable, incluyendo llevar los uniformes 'impolutos'". El motivo era la llegada del crucero Adonia en su primer viaje a la Isla, el 3 de mayo.
 
"Nos quedamos como la novia de Pacheco, vestida y sin ir al baile. Ni un solo americano se asomó por aquí, porque el recorrido ya estaba 'arreglado'", señaló Pozo.
 
"Cuando anunciaron que el Adonia entraría a puerto cada 15 días, lleno de americanos, creímos que los negocios iban a tener un despegue. El turismo americano es el más codiciado, y todos los negocios de esta zona estaban alistados para ofertar lo mejor. La realidad fue otra: ya todo estaba 'amarrado'", se quejó Cedeño, dueño de un Chevrolet descapotable que opera en el sector privado.
 
'Las relaciones correctas'
 Uno de los pocos locales que ha podido beneficiarse de la llegada de los turistas del crucero es el restaurante Leyenda Habana, del Cerro, gracias a lo que su barman, Pedro Gordillo, llama "las relaciones correctas".
 
"En este giro hay que estar a la viva", dijo Gordillo. "Tenemos conectados a varios guías turísticos que cobran comisión por cada extranjero que nos traen. Cuando se anunciaron los viajes del Adonia a Cuba activamos a nuestros contactos. Nos traen entre seis y diez americanos, no son muchos, pero la cuenta da porque son generosos en la propina", explicó.
 
"Lo mismo hace mi primo en Dulce Habana (en el Vedado). Hasta donde sabemos, esto no representa ninguna ilegalidad sino que es parte de la competencia", concluyó.
 
Pero la suerte de estos locales dependería de viajeros que rechazan seguir el itinerario "dirigido" que les ofrecen los guías del MINTUR.
 
Trabajadores del bar-restaurante Patchanka, en La Habana Vieja, dijeron no obstante que el "'gardeo' es exclusivo con los turistas americanos que llegan en el crucero".
 
"Todos van identificados con un solapín. Son muy pocos los que 'burlan el cerco' de los guías para curiosear por las entrecalles. Es verdad que el crucero está un día en La Habana, pero deberían dejar que los 'yumas' elijan su propio recorrido, para darle aire a los negocios más pequeños", se quejó un empleado
 
Fuentes consultadas del sector turístico a cargo del programa, y que pidieron el anonimato, dijeron que el recorrido en este último arribo del Adonia "no ha sufrido variaciones" respecto a los dos viajes anterior. Al ser preguntados sobre si los negocios del sector privado regentados por exmilitares o familiares de miembros del Gobierno son "incluidos y promocionados" en el itinerario que incluye La Habana, Cienfuegos y Santiago de Cuba, rechazaron contestar.
 
Leo Conesa, director del proyecto de artes visuales La Marca, en La Habana Vieja, opinó que el criterio de que el turismo norteamericano genera más ganancias "es más un mito que una realidad".
 
"Aquí hemos sobrevivido, desde siempre, con el turismo de otras nacionalidades. No quiero hacer comparaciones, pero La Marca no depende de este turismo (estadounidense), y no creo que ninguno de estos negocios, restaurantes, artesanos, cocheros, anticuarios, vaya a quebrar porque no reciba turismo americano. De hecho, la mayor parte de nuestra clientela es local", afirmó.
 
En los Almacenes San José, Leonor Pereda, vendedora de bisutería y souvenirs, aseguró que los estadounidenses del crucero que han llegado hasta su local "son poquísimos, nunca más de diez".
 
"Apenas están 20 minutos, siempre acompañados y apurados por guías que más bien parecen guardaespaldas, asesorando al 'yuma' sobre qué es lo barato o lo caro", criticó Pereda.
 
"Eso no está bien. Lo hacen porque aquí no le damos comisión ninguna por cada venta. En lo que a mí respecta, los cruceros de americanos no mejoraron en nada el panorama como muchos creímos. Pasó lo de siempre: el pez grande se come al chiquito".
 
cubano-que-1.jpg (1089×748)


Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados