La oposición bloquea el referéndum sobre el matrimonio gay en Australia
Los laboristas argumentan que la ley debe aprobarse directamente en el Parlamento
Manifestación a favor del matrimonio gay el pasado junio en Sídney. (Saeed Khan AFP)
La mayoría de los australianos apoya el matrimonio igualitario, pero no la celebración de un referéndum al respecto
La legalización del matrimonio igualitario podría retrasarse al menos tres años en Australia después del bloqueo del Partido Laborista del referéndum sobre este asunto que el Gobierno quería hacer. Los socialistas se oponen a que la decisión de legalizar las bodas entre personas del mismo sexo se someta a una consulta pública, como pretendía la coalición de centro-derecha, que gobierna el país. "Australia no es así. Podemos acordar que todos tienen derecho a contraer matrimonio a través de un voto libre en el Parlamento, y así es como debe hacerse", ha declarado el líder laborista, Bill Shorten.
La coalición liberal-nacional del primer ministro Malcolm Turnbull había presentado una ley en el parlamento para realizar un plebiscito sobre el matrimonio igualitario el próximo febrero. La norma no ha obtenido el apoyo de la oposición que necesitaba, ya que la coalición de centro-derecha tiene mayoría en la cámara baja pero no en la alta. Esto es un nuevo golpe para Turnbull, que ve como su popularidad se desvanece progresivamente.
Un 61% de los australianos apoyan el matrimonio igualitario, según una encuesta de Gallop del pasado agosto, pero la incapacidad del primer ministro de sacar adelante una ley para legalizarlo puede hacer decrecer ese apoyo. Australia es uno de los pocos Estados occidentalesque aún no han aprobado las bodas gais. En ese país, las parejas del mismo sexo pueden firmar contratos de unión civil que se reconocen en la mayoría del territorio, pero no a nivel federal.
Numerosas organizaciones que trabajan por los derechos de gais, lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersexuales (LGTBI) también se habían mostrado en contra de una consulta que consideraban que alentaba el discurso homófobo y la retórica contra el matrimonio igualitario. El Gobierno había asegurado que la consulta —que tendría un coste de unos 115 millones de euros— no sería vinculante.
"¿Por qué deben los gais australianos estar sujetos a un proceso legislativo diferente al resto de ciudadanos?", ha reclamado el líder laborista. "¿Por qué debe una pareja que mantiene una relación comprometida llamar a la puerta de 15 millones de sus compatriotas australianos y preguntarles si están de acuerdo con ello? La manera más sencilla es hacer lo que el Parlamento ha venido haciendo durante cien años: legislar", ha recalcado.
Mientras, el primer ministro Turnbull ha afirmado que si el referéndum era bloqueado, la legalización del matrimonio igualitario no se propondría de nuevo hasta después de las próximas elecciones. Es decir, en 2019.