Carrie Fisher, la actriz que quiso educar a su hija libre de estereotipos de género
Debbie Reynolds junto a su hija Carrie Fisher
Muere Debbie Reynolds un día después que su hija, Carrie Fisher
Carrie Fisher, la actriz que dio vida a la inolvidable princesa Leia en la saga Star Wars (o La guerra de las galaxias, como los que tenemos ya cierta edad la conocemos) ha fallecido este 27 de diciembre a los sesenta años de edad. Mujer de fuerte personalidad, franca y transparente incluso sobre los temas más delicados (como su trastorno bipolar o sus adicciones), Carrie Fisher fue también una persona abierta que quiso educar a su hija al margen de los estereotipos de género.
Así lo contaba la que es su única hija, la también actriz Billie Lourd, en una entrevista concedida en septiembre al director, productor y guionista Ryan Murphy para Teen Vogue. “Tu madre, Carrie Fisher, es conocida por encarnar a la icónica princesa Leia en la trilogía Star Wars original, y es también una feminista convencida. ¿Qué consejo te dio cuando empezaste tu carrera como actriz?”, le preguntó Murphy.
“Me dijo que fuese con la verdad por delante, que fuese amable y que tuviera confianza en mí misma. Me educó de forma que no pensase que hombres y mujeres somos diferentes. Me educó sin género. Es la razón por la que me puso de nombre Billie [un nombre que tal y como se pronuncia en inglés puede ser atribuido tanto a chicos como a chicas]”, le contestó Billie Lourd. “No se trata de ser una mujer fuerte, sino de ser una persona fuerte. Recuerdo que una vez me dijo: ‘nunca te dicté un credo. Yo era más de predicar con el ejemplo’”, añadió.
Bryan Lourd, el ex de Carrie Fisher que salió del armario
Billie Lourd es hija de Carrie Fisher y del agente Bryan Lourd, su pareja durante tres años. Bryan Lourd acabó rompiendo con Fisher e iniciando una relación con otro hombre, circunstancia de la que luego Carrie Fisher ha hablado abiertamente y con gran sentido del humor, como solía hacer con todas sus historias personales. “Me dijo después que yo le había vuelto gay… por recaer en la codeína [uno de los medicamentos opiáceos a los que la actriz fue adicta]. Y yo le respondí: “Sabes, nunca leí esa advertencia en el prospecto”, contaba en su autobiografía, Wishful Drinking, publicada en 2008.
Ello no quiere decir que Fisher no sufriera por la ruptura. “La gente me pregunta si cuesta aceptar el hecho de que me dejara por un hombre”, declaró en su momento. “Pero no me importa lo que la gente diga. Sí que me sentí humillada y traicionada, y llegué a creer que de alguna forma había sido culpa mía. No sé si me llegué a creer que era yo la que lo había vuelto gay, pero sí que yo había fallado, y eso es lo que cuenta”, añadía.
Pese a todo, Carrie Fisher y Bryan Lourd (que recientemente contrajo matrimonio con el empresario de restauración Bruce Bozzi) han mantenido a lo largo de los años una relación de amistad y cariño. “Bryan es un buen hombre en muchos aspectos. Me costó un tiempo recomponerme, pero luego empezamos a ir juntos de vacaciones, Billie, Brian y yo, y el hombre con el que salía. Porque los dos la queríamos mucho. Y yo quería que Billie viese que podíamos ser amigos, porque eso es algo que yo nunca pude vivir con mis propios padres. Estoy contenta de haberle dado a Billi un buen padre. En realidad él es todo lo que mi padre no fue. Incluyendo gay”, contaba sin perder su sentido del humor.
Muere Debbie Reynolds un día después que su hija, Carrie Fisher
La intérprete, conocida por su papel en «Cantando bajo la lluvia» ha fallecido en Los Ángeles tras sufrir un derrame cerebral
La actriz estadounidense Debbie Reynolds, madre de la recientemente fallecida Carrie Fisher, ha muerto este miércoles, 28 de diciembre, después de haber sido hospitalizada tras sufrir una posible apoplejía, según reportaron los medios de Hollywood., Debbie estaba en la casa de su hijo en Beverly Hills organizando el funeral de Carrie y alrededor de las 13 (hora local) tuvieron que llamar de emergencia al 911.
Una unidad móvil de emergencias se había desplazado horas antes hasta la vivienda de su hijo, el guionista Todd Fisher, ubicada en Beverly Hills en la que se encontraba Reynolds cuando comenzó a encontrarse mal. La llamada a emergencias al 911 se registró pasadas las 13.00 horas local (las 22.00, hora peninsular española).
Tras la muerte de su hija, Reynolds se mostró conmovida en su cuenta de Facebook, donde agradeció todas las muestras de cariño recibidas. «Gracias a todos los que han sentido el talento de mi adorada e increíble hija. Estoy agradecida por vuestros pensamientos y plegarias que ahora la estarán guiando hacía su nuevo destino», agregó la actriz.
Una carrera profílica
Debbie Reynolds nació en El Paso (Texas) el 1 de abril de 1932 y, tras ganar un concurso de belleza con tan solo 16 años, consiguió hacerse un hueco en el mundo del cine. Fue en la década de los 50 cuando despuntó gracias a su papel en «Cantando bajo la lluvia». Una elección muy polémica debido a su falta de talento con el baile, incluso Gene Kelly tuvo que ayudarla a practicar claqué.
Su nombre y apellidos figuran en los créditos de otras cintas como «I Love Melvin» (1953) o «The Tender Trap» (1955). En la década de los 60 consiguió una nominación al Oscar en la categoría de Mejor Actriz por su papel en «Molly Brown, siempre a flote». Sin embargo, fue Julie Andrews quien gracias a su papel de Mery Poppins se hizo con la estatuilla.
Posteriormente su carrera pasaría por Broadway, con trabajos en obras como «Irene», aunque continuaría teniendo presencia en Hollywood al dejar su huella en «Mother» (1996), «In & Out» (1997) o «Behind the Candelabra» (2013), su último trabajo.
También grabó discos y llegó a la pequeña pantalla donde será recordada como la madre de Grace en la serie de la NBC «Will & Grace», donde trabajó desde 1999 a 2006.
Una vida personal agitada
Debbie Reynolds fue conocida también por su turbulenta vida sentimental y su mala suerte con las relaciones.Su matrimonio con Eddie Fisher, padre de la recién fallecida Carrie Fisher, con quien se casó por primera vez en 1955, marcó su vida personal. Tan solo cuatro años duró su matrimonio después de que Fisher, que era un popular cantante de la época, la abandonase para casarse con Elisabeth Taylor.
Posteriormente contraería matrimonio en 1960 con Harry Karl, del que se separaría en 1973 después de que éste dilapidara su fortuna en el juego, y su tercer marido sería Richard Hamlett, con quien estuvo casada desde 1984 hasta 1994.
Su relación con su hija tampoco fue fácil debido a que Carrie Fisher, tal y como ella misma declaró, «no quería ser hija de Debbie Reynolds». Ambas pasaron diez años sin hablarse por elección de la propia Fisher y tardaron más de treinta en recuperar la confianza.
Asimismo, Debbie Reynolds sobresalió a lo largo de su vida como una gran coleccionista de objetos relacionados con el mundo de Hollywood.
Descansen en paz.