Alguien que conoció bien a Trump lo describe: “desagradable, avaricioso, arrogante”
Salen a la luz unas notas del alcalde de Nueva York Ed Koch sobre el actual presidente
De izquierda a derecha, Donald Trump, el alcalde Ed Koch y Roy Cohn en la inauguración de la Torre Trump en 1983
Si hay un lugar al que la fortuna y el nombre de Donald Trump están intrínsecamente ligados, es Nueva York. Y si hay un alcalde mítico para la Gran Manzana, ese es el demócrata Ed Koch, edil durante los años en que más se transformó la vibrante capital del mundo, de 1978 a 1989.
A Koch se le conocía por no ahorrarse nunca ningún comentario, por incisivo que fuera. Si tenía algo que decir, lo decía. Y de Trump dijo mucho. Hasta ahora era conocida la enemistad entre ambos hombres. Los herederos de los documentos de Koch, sin embargo, se han asegurado de revelar una serie de anotaciones que hizo en cuadernos que hasta ahora se alojaban en un archivo privado.
El veredicto de Koch sobre Trump es contundente: "Donald Trump es una de las personas más desagradables que he conocido en los 12 años en que he sido alcalde. No puedo comprender cómo para muchos se ha convertido en una especie de héroe". Eso era a finales de los 80. No imaginaba Koch, fallecido en 2013, que Trump iba a convertirse en presidente.
Describe a Trump en unas cartas que ha revelado The New York Times como alguien "avaricioso" y, lo más preocupante, revela la concepción que el ahora presidente de Estados Unidos tiene de la política: "Trump se consideraba amigo mío, y por eso, o porque donó o amasó 70.000 dólares para una de mis campañas para alcalde, esperaba que le diera algo en compensación. Nunca se lo dí. Piensa que soy desleal".
Ambos habían tenido disputas muy públicas sobre diversos asuntos, entre ellos los impuestos inmuebles sobre las célebre Torre Trump, donde tiene su residencia habitual el magnate, y otros proyectos como el de construir un complejo televisivo en Manhattan.
Trump donó a la ciudad importantes cantidades de dinero para dos proyectos: un centro de convenciones en el West Side de Manhattan y una pista de patinaje sobre hielo en Central Park. En ambos casos pidió que las instalaciones, tras sus donaciones, cambiaran su nombre por el de Donald Trump. "¡Qué arrogancia", sentencia Koch. "Me sorprende que no quiera que cambiemos el nombre de todo Central Park por el suyo".