Si vas a la playa, no olvides a tu perro
Llevar a tu perro a la playa es una de las experiencias más divertidas que puedes vivir con tu amigo de cuatro patas. Tu mascota disfrutará al máximo de todos los olores y sabores del mar y de la playa.
Correrá sin parar porque a los perros les encanta la sensación de la arena bajo sus patas y la libertad que da un espacio natural tan grande.
Ahora vienen las malas noticias.
No en todas las playas se admiten perros. Pero si vas a una donde tu mascota te pueda acompañar, no dudes en llevarla. De seguro lo pasarán genial. No te puedes imaginar la cara de felicidad de un perro cuando entra en la arena sin correa, comienza a correr y a jugar con el resto de los perros. ¡No tiene precio!
Fuera de temporada playera, entre octubre y abril, podrás ir a casi cualquier playa, ya que el mantenimiento de las mismas no comienza hasta la primavera. Ahora bien, cuando vayas a la playa con tu perro, debes tomar en cuenta las siguientes recomendaciones para que todo resulte bien:
No permita que su mascota manche o moleste a la gente.
Evita las horas de mayor calor
El calor afecta a los perros con mayor rapidez que a lo humanos. Así que en la medida de lo posible, evita la playa en las horas centrales del día.
Lleva suficiente agua
Así evitarás que se deshidrate y caiga en la tentación de beber agua salada. Recuerda que los perros no sudan, pero se refrescan jadeando y al hacerlo eliminan vapor de agua, por lo que un buen suministro de agua fresca es clave. Colócale un envase con agua para que sepa dónde beber cuando lo desee.
Asegúrate de que tenga sombra
Colóquense bajo un árbol, una sombrilla o un toldo. Es importante tener un lugar fresco donde poder escaparse del sol.
Ponle protector solar
Aunque no lo creas, los perros también pueden quemarse por el sol. En tiendas especializadas venden protectores solares diseñados para ellos. Consúltalo con el veterinario y sigue atentamente las recomendaciones. Evita siempre las cremas que contengan fragancias y óxido de zinc, ya que puede resultar tóxico para los perros.
Cuidado con sus patitas
Los perros tienen una piel resistente, sin embargo, el calor de la arena o la calle, especialmente en las horas de mucho calor, puede quemar la zona de las almohadillas, provocando dolorosas heridas. Trata de no exponerlo a altas temperaturas y protege sus almohadillas hidratándolas. Y como medida de precaución extra, en la playa, mójale las patas cada cierto tiempo.
Un baño de agua dulce y cepillo para terminar
Importante antes de ir a casa o al llegar dale un buen baño de agua dulce para eliminar los restos de la arena y sal del mar que pudieran irritar la piel del perro. Sé que a veces da pereza, pero tu perro y tu casa lo agradecerán, ¡y no cuesta tanto!
Un consejo más. No lo pierdas de vista en ningún momento, fundamentalmente si es una playa donde hay mucha gente y otras mascotas.