El otro huracán que azota La Habana
Incertidumbre y desabastecimiento marcan la fase informativa decretada en la capital ante la amenaza de Irma
La fase informativa decretada por las autoridades de la Defensa Civil de Cuba para la zona occidental, ofrece cierta confianza de que solo las lluvias del huracán Irma afectarán la capital.
Sin razones para encender las alarmas, los habaneros están lejos de considerar las consecuencias que podría tener el fallo de los pronósticos meteorológicos. Tampoco se tiene en cuenta que para daños no hace falta el paso de un intenso huracán por la céntrica avenida de 23. En 1988 el huracán Gilbert describió una trayectoria a más de cien kilómetros de la isla y ocasionó penetraciones del mar, pasando a la historia como el huracán del siglo.
El recorrido por la ciudad de un equipo de CubaNet constató cierta despreocupación en las autoridades y residentes. Hasta la fecha no son evidentes las medidas para disminuir los posibles daños de las lluvias y vientos de un fenómeno meteorológico que encendió las alarmas del Caribe.
La poda de árboles, la recogida de escombros o el aseguramiento de lugares vulnerables a vientos de alta velocidad, no son parte de movimiento de una ciudad que parece haber dejado su suerte a la providencia.
Hay quienes no se conforman con la calma oficial, a partir de su experiencia sobre los desastres que ha dejado en sus hogares de la penetración del mar.
Los pobladores de las zonas bajas del Vedado, próximas a la línea del mar, reclaman acciones de las autoridades para evitar los desastres prevenibles
Mariño, residente en la calle 5ta y B, Vedado, explicó que la ayuda llega cuando la inundación supera el cuello:
“Para nosotros, aunque pase por La Habana o no, nos afecta. Cuando penetra el mar al momento tenemos el agua al cuello. Siempre es lo mismo porque no realiza la limpieza de escombros. Después vienen con los camiones, cuando el agua no pasa el nivel de los muros de nuestras casas, y la ola que hacen esos carros mete el agua para adentro¨.
Pedro Nogueira, jefe de una brigada de Aguas de La Habana que sanea las alcantarillas de la zona, se quejó ante la falta de coordinación para que el trabajo que realizan sea eficiente:
“Durante el mantenimiento que estamos haciendo nos hemos encontrado con desechos de carne de puerco y sancocho tirado en los tragantes, pero además esta aglomeración de basura en la zona de alto riesgo de inundación, obstruye y provoca la tupición en tuberías que son para la circulación de agua, no para solidos. El trabajo de nosotros es por gusto porque lo primero que hay que recoger es la basura”.
Se acabó lo que no había
La fase informativa para la capital no evitó que los habaneros salieran a las tiendas en busca de suministros que le permitieran enfrentar la falta de electricidad, ante las de fuertes lluvias que se avecinan.
La venta de linternas a 8.00 CUC en la Tienda Panamericana ubicada en los bajos del edificio FOCSA, Vedado, matizada por la cola, forma parte de la descripción de las escasas opciones. Otros de los entrevistados por CubaNet en las calles del municipio alegaron que su economía solo llegaba para comprar velas que, a mitad de mañana, se habían agotado.
Alfredo Matos declaró haber recorrido varias tiendas del Vedado en busca de velas
“Vengo desde Calzada y C buscando velas y no las encuentro, que más te puedo decir. Pude garantizar algo de comestible, pero hace falta que vendan velas”.
Nieves compró una linterna, pero no encontró alimentos en conserva.
“No he podido encontrar latas de sardinas que son las más baratas, no hay en ningún lado. Voy a tener que comprar muslo de pollo, es lo único que he visto”.
Incertidumbre y desabastecimiento marcan la fase informativa decretada en la capital ante el potente huracán que de una forma u otra afectará la capital cubana. Hay quienes, como Alberto Hinojosa, confían que La Habana no sufrirá daños porque el huracán Irma se alejará aliviando los embalses de agua con las lluvias.
“Yo creo que toda esta cola y ese barullo es un papelazo porque por aquí no va a pasar (el huracán). A lo mejor es estrategia de ellos (el gobierno)”.
ACERCA DEL AUTOR
Augusto Cesar San Martin. Nació el 20 de abril de 1967 en Ciudad de La Habana. Fue captado por el Ministerio del Interior y estudió Ciencias Penales en el Instituto Hermanos Martínez, en el que se graduó. Por discrepancias con los militares, pidió la baja permanente de ese organismo, solicitud que le fue denegada durante un año. En ese tiempo estableció contacto con los opositores pacíficos y fue encarcelado en 1994. Lo declararon preso de conciencia en 1996, y a su salida de la cárcel colaboró con la agencia Cuba Press de 1997 a 1999. En el año 2006 fundó el Centro de Información José Lezama Lima.
Septiembre 7, 2017