EL LÍDER DE LA CAMPAÑA DE TRUMP
EN OKLAHOMA SE DECLARA CULPABLE DE PROSTITUCIÓN DE MENORES
El ex-senador republicano Ralph Shortey, que fue jefe de campaña en
Oklahoma de Trump durante las presidenciales de 2016, se declara culpable de un delito de prostitución de menores
Por Jordi García
Ya hace tiempo te contamos la historia de Ralph Shortey, un senador republicano tremendamente LGTBfóbico al que pillaron en un motel de carretera junto a un chaval de 17 años al que había ofrecido dinero a cambio de “cosas sexuales“.
Shortey, de 35 años, dimitió de su cargo como senador republicano por el estado de Oklahoma. Su largo historial de defensa de la familia tradicional (como la suya, que está casado con su novia del instituto y tiene cuatro hijas) le llevó a ser elegido como director de la campaña electoral de Trump para las elecciones de 2016.
La policía pilló a Shortey en la habitación de un motel Super 8 en compañía de un chico de 17 años y junto a una caja de preservativos abierta y un montón de lubricante. Entre las pruebas recolectadas y presentadas por los agentes había varios anuncios en Craigslists en los que, según la policía, “intentaba contactar con hombres jóvenes para mantener relaciones sexuales“. En un anuncio buscaba, por ejemplo, a chicos blancos o mestizos “cuanto más jóvenes (legal) mejor“.
En la conversación que Shortey mantuvo con el chico con el que le pillaron descubrieron que le había ofrecido dinero para hacer “cosas sexuales” y el ex-senador se refería a él como su “Baby Boy“, en referencia al sexo bareback. Eso llevó a la fiscalía a acusarle de varios delitos entre los que estaban el de prostitución de menores, el de cometer prostitución de menores a menos de 300 metros de una iglesia y el de ser poseedor de pornografía infantil.
'DISCULPAS PUBLICAS'
Lo único que, por ahora, ha dicho este gran defensor de los valores familiares ha sido a través de un comunicado en el que anuncia su dimisión como senador y agradece el tiempo que le han permitido servir a los contribuyentes: “Porque me tomo muy en serio esa responsabilidad, reconozco que los cargos en mi contra son una distracción para sus intereses y para el resto de la legislatura, que debería ser útil para todos los ciudadanos de Oklahoma. Mi dimisión es una prueba de mi respeto por el servicio público y los deberes de nuestros cargos electos. Pido respeto por la privacidad de mi familia -mi mujer y mis cuatro hijas- mientras me defiendo de estos cargos.”
Claro, no hay mejor forma de mostrar respeto a su cargo público que utilizar el dinero ganado con él para prostituir a un menor de edad y luego ir al senado a votar en contra de los derechos LGTB porque van a “destruir” la familia y la moral.
Shortey se enfrentaba a una condena de 25 años de prisión, pero acaba de llegar a un acuerdo con la Fiscalía para declararse culpable del cargo de prostitución de menores a cambio de que se retiren el resto de cargos. El delito por el que se ha declarado culpable contempla una pena de un mínimo de 10 años de cárcel y un máximo de cadena perpetua.