Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: El punto P, la zona erógena menos valorada por los hombres
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: cubanet201  (Mensaje original) Enviado: 01/03/2018 20:50
CONSULTORIO DE SEXO
Si las mujeres tienen punto G, ¿qué punto tienen los hombres?
No debemos cuestionar nuestra orientación sexual, la búsqueda del placer es totalmente libre. La mayoría de los hombres desconocen que tienen un punto P y peor aun para la mayoría su estimulación es un tabú. La sexóloga española Núria Jorba responde a tus dudas relacionadas con la sexualidad y la pareja.
 
                                                                                        STEVEN GRAND, EL BUENORRO CANTANTE ESTADOUNIDENSE GAY
El punto P, la zona erógena menos valorada por los hombres
   Núria Jorba, sexóloga - La Vanguardia
El punto G de los hombres se denomina punto P, debido a que este punto se encuentra ubicado en la próstata.  Se habla de que es una de las zonas erógenas más potentes del organismo masculino, a través de su estimulación ya sea directa o indirecta el hombre puede experimentar mayor excitación, un orgasmo más intenso y una eyaculación más potente.

Desde el año 1982 que se hizo famoso el término “punto G” referido al sexo femenino, los hombres han querido descubrir y encontrar el suyo.  Este punto P se ha convertido en una herramienta para el placer masculino pero, de golpe, nos encontramos con una barrera por parte de ellos, cuando hablamos de cómo conseguir estimularlo.
 
Pero, ¿por qué si este punto produce orgasmos más intensos no es tan conocido o apreciado por los hombres?. La razón principal, además del desconocimiento, es por qué una de las formas de estimularlo es a través del ano y para muchos hombres cualquier actividad que tenga que ver con el ano puede ser catalogada como dos cosas: como algo asqueroso y sucio o como algo relacionado con la relación sexual homosexual.
 
La realidad es que el ano, tanto de heterosexuales, bisexuales u homosexuales, es decir de todas las personas, está lleno de terminaciones nerviosas que con ciertos estímulos nos producen placer. El que te toquen el ano, lo penetren y lo disfrutes no define tu orientación sexual, simplemente es una parte más de tu cuerpo que te gusta que sea tocada.
 
¿Cómo estimulo el punto P?
Si nos interesa conocer las sensaciones de placer que nos puede aportar este punto P lo recomendable es empezar a investigarlo a solas para descubrir nuestros límites y sentirnos realmente cómodos.  Además, hay un libro destinado a la temática titulado “La guía definitiva para el placer de próstata” de Charlie Glickman y Aislinn Emirzian, el cual ofrece interesantes ideas y trucos para experimentar nuevas sensaciones.
 
La manera más sencilla y directa es a través del ano, introduciendo los dedos o usando aquél complemento erótico que nos motive. Para esto es necesario relajar el esfínter con caricias, puedes recibir incluso besos negros que sumados a una respiración relajada ayudara a que tu esfínter se dilate y se puedan introducir los dedos, si es la primera vez que lo haces, puedes comenzar con el dedo meñique poco a poco y por favor no olvides lubricante y estar muy limpio.  Ya que hayas logrado introducir los dedos tienes que realizar una leve presión sobre la pared, curvando el o los dedos hasta llegar a sentir la próstata (se siente como una especie de “bultito”), una vez que llegues ahí comienza a estimularlo con tu dedo.  Si de plano no te alcanzas, puedes pedirle a tu pareja que lo haga por ti. La estimulación del punto P en conjunto con el sexo oral es una buena forma para llegar al cielo.
 
De todos modos, podemos acceder también de modo más indirecto o externo, a través del perineo (la zona que se encuentra entre el ano y los testículos).
 
Existen muchos más puntos que provocan placer, que desafortunadamente ni hombres ni mujeres suelen comprobar. Averiguar cuáles son aumenta la calidad de las relaciones sexuales y de los orgasmos ya que la estimulación gradual de los puntos más erógenos del cuerpo humano ayuda también a liberar más tensión sexual durante el orgasmo. Como dicen los orientales, ‘hay que pensar menos en el destino y gozar cada instante del camino que se recorre’
 
No debemos cuestionar nuestra orientación sexual, la búsqueda del placer es totalmente libre.  Lo más importante es tener claro que nuestra orientación sexual no está determinada por aquello que nos guste hacer sexualmente, no debe cuestionar la heterosexualidad, la virilidad ni nada parecido. La búsqueda del placer es totalmente libre, puede estar en la próstata, en el cuello, en la espalda, etc. pero sobretodo está en nuestra mente.
 
¿Te atreves?
 
Fuente:  La Vanguardia


Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: guajiro cubano Enviado: 13/03/2018 17:49
«EDUCACIÓN SEXUAL»
El Punto L, el Punto P, o el del "millón de dólares", son zonas tan cotizadas como desconocidas para muchos varones, según apunta la sexóloga Ruth González Ousset.  Al igual que en la mujer el ano es sumamente sensible, en el hombre lo es todavía más, ya que se conecta directamente con la próstata. 

                                                          MADE EN CUBA
Muchos hombres desconocen que tienen varios "Puntos G" de placer
     Por L.PERAITA - ABC
No son pocos los artículos escritos sobre el punto G de las mujeres; tanto sobre si existe o no, si está en un lugar u otro de su organismo, los efectos de su estimulación... Pero, si las mujeres tienen punto G, ¿qué punto tienen los hombres? ¿O es que ellos no tienen?
 
Pues señores..., sí, existe. Es más, ¡los hombres tienen más de un punto G! Así lo asegura Ruth González Ousset, sexóloga, counsellor y terapeuta de pareja, miembro de la Asociación Estatal de Profesionales de la Sexología (AEPS) y de la Asociación de Psicoterapia Humanista Integrativa y Counselling de España (APHICE).
 
«Por un lado disponen de un punto muy cotizado desde la antigüedad porque los maestros taoistas ya pedían entonces dinero por enseñar a los ciudadanos dónde se encontraba este ansiado lugar. En la actualidad se denomina como el "Punto del millón de dólares" y es una zona muy cotizada porque cuando tienen muchas ganas de eyacular, pero desean posponer este momento, basta con presionarlo. Se encuentra en una zona intermedia entre los testículos y el ano».
 
Esta sexóloga explica que es una zona de gran interés porque la eyaculación precoz es un problema frecuente que afecta en una relación sexual tanto a ellos como a ella, «por ello, muchos hombres en consulta me piden localizarlo», confiesa. Reconoce que es difícil dar con él y que pocas personas saben de su existencia, «pero existe y está al lado de otro punto clave en el hombre: el L».
 
El Punto L, se localiza en la parte exterior del músculo pubococcígeo (PC), entre la parte inferior de los testículos y del ano. Es el denominado Perineo. «El orgasmo mediante estimulación del Punto L es diferente al convencional, al experimentado por la estimulación del pene, o el que se siente cuando se realiza un coito anal, siempre hablando de hombres, ya que es más lento y progresivo, pero a la vez más profundo y fuerte».
 
Ruth González Ousset asegura, además, que hay estudios que señalan que estimular la próstata reduce el riesgo de tener cáncer en este órgano. Es decir, que no solo es interesante por la propia satisfacción que proporciona, sino por su carácter preventivo de la enfermedad. «Este otro punto, denominado P, está dentro del ano y conecta con la próstata. Para estimularlo habría que introducir el dedo por el ano a modo de garfio hacia la próstata, de ahí su nombre de Punto P. La zona donde se encuentra estaría a unos 7 centímetros de la entrada del ano».
 
El problema es que no se suele estimular, la mayoría de los hombres no lo hacen. «Diría que casi el 100% no lo hacen —apunta Ruth González Ousset—. ¿La razón? Se trata de un tema tabú y muchos hombres no lo practican porque lo relacionan con la homosexualidad. Y, a las mujeres les da reparo estimular este punto porque piensan que a su pareja no les va a a gustar por esta misma cuestión».
 
Cómo realizar la estimulación
Al igual que en la mujer el ano es sumamente sensible, en el hombre lo es todavía más, ya que se conecta directamente con la próstata. «Una técnica para estimularlo es acariciar el pene mientras se acompaña esta masturbación con la inserción de uno o dos dedos en el ano hasta llegar al clímax», detalla González Ousset.
 
Para estimular el Punto L, que se localiza en la parte exterior del músculo pubococcigeo (PC), entre la parte inferior de los testículos y del ano, se puede proceder de varias formas: oral, a través del coito o de la masturbación, y de manera tanto interna como externa. «Sin duda, la forma más fácil de conseguir un orgasmo por estimulación del punto L es mediante la masturbación —matiza esta sexóloga—. Se puede estimular externamente presionando directamente con los dedos el Punto L y realizando, al mismo tiempo, una masturbación convencional».
 
Internamente se puede conseguir introduciendo un dedo en el ano, «algo que no todos los hombres están dispuestos a practicar, para la estimulación de la próstata y del Punto L. Si se quiere estimular mediante sexo oral, entonces se debe realizar una aspiración suave y rítmica sobre la zona», explica.
 
Conseguirlo mediante el coito es un algo más complicado y requiere de experiencia o, por lo menos, de mucha práctica, «ya que depende en gran parte de la destreza por parte de la mujer para estimular con su vagina el Punto L masculino», concluye González Ousset.
 
FUENTE:  ABC.es
 


 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados