Luis Manuel Otero
Los galardonados con el premio
Campeones de la Libertad de Expresión se quedan sin poder recogerlo
Luis Manuel Otero Alcántara y Yanelis Núñez, promotores del Museo de la Disidencia, se quedaron sin poder asistir el pasado jueves a la ceremonia de entrega del Premio Campeones de la Libertad de Expresión 2018 que promueve la organización no gubernamental británica Index of Censorship por no cumplir con los requisitos económicos que el Reino Unido demanda para la concesión de un visado.
Ambos artistas no pudieron presentar reportes sobre el estado actual de sus cuentas bancarias para justificar que no pensaban emigrar a ese país y los convierte en "no confiables por cuestiones económicas" para las autoridades consulares, contó Otero a 14ymedio.
El artista considera absurdo el requisito teniendo en cuenta que "en Cuba, cuando una persona tiene una postura crítica con el Gobierno queda relegada de tener entradas económicas a partir del sistema" y es poco probable que pueda mantener ahorros en las entidades bancarias estatales, las únicas que existen en el país.
A pesar de no poder asistir a la premiación, Otero asegura que el galardón, que ganaron en la categoría de Arte, confirma que no están solos y "que allá afuera hay personas mirando lo que pasa aquí". El reconocimiento "llega en un momento de mucho trabajo", cuando los gestores del Museo están enfrascados en la organización de la #Bienal00.
"Que la organización Index of Censorship, con tanto prestigio, se haya fijado en nosotros, nos da mucha felicidad", agrega. La candidatura del Museo fue presentada por la artista cubana Tania Bruguera y tuvo que competir con otras 400 propuestas.
Entre los galardonados este año destaca un colectivo de blogueros y activistas de la República Democrática del Congo, una ONG de derechos humanos que recopila denuncias en Egipto y una periodista de investigación de Honduras, que reporta lo que ocurre en el país centroamericano.
Otero Alcántara precisa que el premio "no tiene un monto metálico pero sí un gran simbolismo". Además, en su estancia en Londres, los dos iban a asistir a un taller sobre algunas temas como la seguridad en las redes sociales y la manera de conseguir financiación para otras ideas y proyectos.
Durante un año el Index of Censorship iniciará un proceso de observación de alguno de los proyectos del Museo de la Disidencia.
La Bienal alternativa de arte que organizan Núñez y Otero está programada para los días entre el 5 y el 15 de mayo. La inauguración tendrá lugar en la sede del Museo, la calle Damas 155 en La Habana Vieja.
Los organizadores han confirmado la participación de 40 artistas nacionales, residentes en la Isla o en el exilio, además de 30 artistas extranjeros, de los cuales al menos 11 viajarán a La Habana y el resto enviará sus obras.
Desde que se anunció por primera vez esta bienal alternativa, sus organizadores explicaron que nacía "ante la decisión del Ministerio de Cultura, del Consejo Nacional de las Artes Plásticas y del Centro Wifredo Lam de posponer para el 2019 la celebración de la XIII Bienal de La Habana como consecuencia de los daños provocados por el huracán Irma, prevista del 5 de octubre al 5 de noviembre de 2018".
Después de anunciarse la convocatoria del evento, la Asociación de Artistas Plásticos de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) hizo circular un correo electrónico advirtiendo de que "personas inescrupulosas" estaban "intentando organizar provocaciones" para dividir al gremio artístico.
La última edición de la Bienal de La Habana se celebró entre mayo y junio de 2015. En sus tres décadas de vida, la cita artística ha pasado por diferentes etapas donde primaron la efervescencia creativa, los nefastos efectos de las crisis económica y la censura.
LUZ ESCOBAR