Trump se distancia de Obama y poncha el acuerdo entre Cuba y las Grandes Ligas
POR JORGE EBRO
La lista de Cuba se quedó en papel mojado. Justo una semana después de que la Federación de Béisbol de la isla (FCB) diera a conocer la primera relación de peloteros para ser tomados en cuenta por Grandes Ligas, la Administración Trump se dispone a dar pasos para echar por tierra el histórico acuerdo.
De acuerdo con varias fuentes de prensa, el gobierno estadounidense ha dado marcha atrás a la directiva tomada bajo el mandato del presidente Barack Obama que reconocía a la FCB como un organismo independiente de las autoridades comunistas del país.
“Las Grandes Ligas han informado de los peligros de comerciar con Cuba’’, informó a NBC News un alto funcionario de la administración de Donald Trump, dando cuerpo a lo que se rumoraba desde el mismo momento en que este pacto vio la luz en diciembre del 2018.
El embargo económico a Cuba prohibe que los ciudadanos y negocios estadounidenses comercien con el gobierno de la isla, pero las Mayores encontraron la manera de bordear la ley amparados en una regulación durante la administración Obama que especificaba la independencia de la Federación Cubana.
Una carta del Departamento del Tesoro enviada a las Grandes Ligas explica que “un pago a la Federación Cubana de Béisbol es un pago al Gobierno Cubano. El gobierno de los Estados Unidos contempla a la FCB como un brazo del gobierno cubano’’.
Este cambio impuesto por el gobierno de Trump da marcha atrás a esa orden y obliga a que cualquier acuerdo para permitir que los cubanos jueguen en equipos de Estados requieran de licencias especiales del Departamento del Tesoro.
Por su parte, las Grandes Ligas respondieron a un correo electrónico de El Nuevo Herald que: “Nos mantenemos en nuestra posición en el acuerdo, que es ponerle fin al tráfico humano de peloteros desde Cuba’’.
De cierta manera, este retrotrae a los tiempos en que los peloteros cubanos necesitaban el llamado “desbloqueo’’ de la Oficina de Control de Bienes Foráneos (OFAC) como medida indispensable –junto con la residencia en un tercer país- para recibir la agencia libre y poder firmar.
Según el diario The Washington Post, estos cambios son parte de un esfuerzo más amplio para presionar a Cuba y Nicaragua, dos países que apoyan al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.
“Cuba quiere utilizar sus jugadores de béisbol como peones económicos, vendiendo sus derechos a las Grandes Ligas’’, había escrito el domingo en un tweet John Bolton, Consejero de Seguridad Nacional. “El Pasatiempo Nacional de Estados Unidos no debiera permitir el apoyo del régimen cubano a Maduro en Venezuela’’.
Desde que se supo del pacto, varios políticos como el senador republicano de la Florida, Marco Rubio, lo calificaron de farsa basados en el mismo hecho de que la FCB responde al gobierno cubano y revelaron que lucharían contra el hasta verlo acabado.
Varias personas cercanas al mercado de peloteros cubanos desde el primer día del pacto también se mostraron escépticas de que llegara a implementarse por su complejidad y la realidad política de las relaciones entre ambos países.
“Cancelar este acuerdo es el último golpe fuerte de una administración que busca quitarle al gobierno cubano todos sus recursos sin ningún tipo de cuidado por el bienestar o el apoyo al pueblo cubano’’, apuntó Ric Herrero, director ejecutivo del Cuba Study Group. “La decisión de hoy es una victoria para los traficantes humanos del Caribe y una derrota para todos aquellos impactados por esta política’’.
Por su parte, la Federación Cubana apuntó desde La Habana que “el acuerdo con MLB busca frenar el tráfico de seres humanos, fomentar la cooperación y elevar el nivel el béisbol. Cualquier idea contraria es falsa noticia. Los ataques con motivación política contra el Acuerdo logrado perjudican a sus atletas, sus familiares y a la afición’’.
Aunque las Grandes Ligas y el Sindicato de Peloteros guardaron mucho silencio sobre la implementación del pacto, siempre hicieron énfasis en que su objetivo era “…ponerle fin al peligroso tráfico de peloteros cubanos que deseen jugar béisbol profesional en los Estados Unidos’’, de acuerdo con una carta enviada en enero al Departamento del Tesoro y al Departamento de Estado.
Incluidas en la carta, además, estaban las historias de fugas de peloteros como José Abreu, Yoenis Céspedes, Yasiel Puig, Leonys Martín, pero la administración Trump evidentemente no cambió su curso de acción.
“Cuba continúa beneficiándose y apoyando el gobierno ilegítimo del régimen de Maduro mediante su esquema de petróleo por represión en su intento de mantener a Maduro en el poder’’, escribió el viernes el Secretario del Tesoro Steven Mnuchin. “Los Estados Unidos permanecen comprometidos con una transición a la democracia en Venezuela y señalar como responsable al régimen cubano por su involucramiento directo en la tragedia de Venezuela’’.