El "Periodo Especial" quedó en la memoria de los cubanos como una experiencia terrible: hambre, polineuritis, aumento de la mortalidad materna y de ancianos, larguísimos apagones, disminución drástica del trasporte público, implosión de la calidad de la educación y la salud pública…
Hoy, la situación no es tan desesperada como la de los años 90, pero las señales se acumulan y, ante la crisis en que se encuentra Venezuela, principal proveedor de petróleo, es evidente que la economía de la Isla va hacia una situación crítica.
Este miércoles, en el discurso ante la Asamblea Nacional del Poder Popular para presentar su nueva Constitución, Raúl Castro llegó a decir sobre la situación económica: "tenemos que estar preparados para la peor variante". Acostumbrado al uso de eufemismos, es evidente que el Gobierno está queriendo negar una realidad que ya comienza a golpear a zonas cada vez más amplias de la sociedad.
Estas son las señales inequívocas de que el país se encamina a tiempos duros:
—Los apagones comienzan a aumentar: El racionamiento eléctrico se aplica desde hace más de un año en empresas y establecimientos debido al recorte del suministro de petróleo venezolano. Muchas unidades productivas y de servicios paran por esa causa después del día 20 de cada mes, otras no pueden usar sus aires acondicionados.
Pero en las últimas semanas se han registrado apagones en el sector residencial y se ha racionado también la electricidad a los Consultorios del médico de la familia.
¿Llegaron a La Habana los apagones de Venezuela?
De manera subrepticia han vuelto los apagones en Cuba, si acaso se fueron definitivamente alguna vez. Este martes la periodista independiente Luzbely Escobar explicó a Radio Televisión Martí cómo los habaneros han comenzado a sentir la falta de fluido eléctrico.
"Yo te puedo decir que en los últimos dos meses en una semana se va la luz dos y tres veces", explicó desde La Habana Escobar, reportera del diario digital 14yMedio.
En una búsqueda en la prensa oficial la palabra "apagón" o "apagones" sólo aparece relacionada en los diarios Granma y Juventud Rebelde a los sucedidos en las últimas semanas en Venezuela. En las demás ocasiones, refieren al "apagón" analógico de la televisión cubana, indicó el reportero Luis Felipe Rojas.
La falta de información es una constante, agregó Escobar: "Ellos (la Unión Eléctrica de Cuba) siempre lo achacan a que están podando árboles, a cualquier cosa… cuando tú llamas a la empresa te dicen 'no, eso fue una avería', nunca te dicen que forma parte del regreso de los apagones".
Por el apagón de este martes en la mañana en Nuevo Vedado la periodista llamó a la empresa eléctrica y le informaron que duraría "hasta las cinco de la tarde", sin ofrecer más explicaciones.
La Unión Eléctrica de Cuba anunció en mayo de 2018 la entrada en funcionamiento de una nueva planta eléctrica en la provincia de Sancti Spíritus, que aportaría hasta 33,6 megavatios (MW) al Sistema Electroenergético Nacional (SEN), y aseguró reduciría pérdidas y mejoraría el voltaje en una zona "relativamente vulnerable" del país.
Recientemente, varios entrevistados por Radio Televisión Martí en la Isla levantaron la alarma ante la llegada de un nuevo Periodo especial, debido a la vuelta de los apagones.
"Nosotros nos hemos enfrentado a otro Periodo especial, me parece que más fuerte que el del 94 y 95. Está escaseando bastante las cosas", dijo la santiaguera Nurvia Nuñez.
En tanto, la pasada semana la sindicalista independiente Maria Elena Mir Marrero, residente en Guanabo, sentenció: "Ya estamos en Cuba en un periodo especial, ya existen también los apagones… de ocho (de la mañana) a dos o tres de la tarde, son bastante largos".
El Gobierno raciona la electricidad a los Consultorios del Médico de la Familia
Aunque el Partido Comunista esquiva las comparaciones con el "Periodo Especial" ante el desabastecimiento de alimentos y otros productos que azota toda la Isla, medidas de ahorro anunciadas recientemente despiertan las alarmas entre la población.
Los Consultorios del Médico de la Familia en La Habana confrontan una restricción del consumo de energía eléctrica a 50 kilowatts hora mensuales, según confirmaron varias fuentes del sector.
Un funcionario de un policlínico del municipio Plaza dijo que los recortes en el consumo eléctrico de los consultorios están provocando descontento entre los médicos por las afectaciones directas "en el servicio primario de salud que brindan a la comunidad".
"50 kw/h mensuales no alcanzan, y mucho menos si el consultorio tiene, por ejemplo, autoclave (aparato para esterilizar). Aunque existe la indicación de no usar ante la población la frase 'Periodo Especial', la gente está viendo que la realidad conduce a la misma crisis de los años 90", opinó el funcionario.
Un recorrido por varios Consultorios del Médico de la Familia permitió comprobar que el recorte en el consumo eléctrico de esas entidades del Ministerio de Salud Pública es parte de medidas de ahorro que el Gobierno está imponiendo.
Este racionamiento de electricidad ocurre en momentos en que La Habana busca soluciones para una caída de la llegada de petróleo a la Isla debido a la crisis de su aliado Nicolás Maduro, en Venezuela, y la amenaza que representa la renuncia al poder en Argelia de Abdelaziz Buteflika.
El programa del Médico de la Familia surgió en 1984 para extender la atención primaria en la salud pública con un enfoque preventivo. Sin embargo, en las últimas décadas ha experimentado un retroceso que incluye desde la reducción de profesionales destinados a esa labor hasta el deterioro constructivo de los consultorios.
Las direcciones municipales de Salud Pública agobian a los médicos de la familia con trámites y obligaciones burocráticas que perjudican el tiempo para ejercer su función principal: garantizar la atención primaria a sus pacientes. Es común que estos médicos pidan "traslados a centros de salud con menos responsabilidades", afirmó el funcionario, que pidió mantenerse en el anonimato.
Más burocratismo
Otro funcionario, de la Dirección Provincial de Salud Pública, informó que desde hace un tiempo en los Consultorios de Médico de la Familia se instalaron metrocontadores inteligentes que cortan la energía eléctrica una vez alcanzado el límite programado.
"Todo eso conlleva un papeleo tremendo, pues se supone que cada reloj contador se ajusta a las características particulares de cada consultorio, aunque para todos se estableció el consumo de 50 kilowatts hora mensuales", explicó.
Si un consultorio sobrepase la cuota, el médico debe informar al policlínico de su territorio, cuyos responsables deben redactar un informe dirigido a la dirección municipal, encargada de autorizar el restablecimiento del servicio eléctrico.
"Mientras eso sucede, se afecta más del 70% del servicio que brindamos a la población durante todo el tiempo que dure la tramitación", se quejó una doctora que atiende un consultorio en el consejo popular La Rampa.
Cada médico al frente de un consultorio tiene, entre sus obligaciones, hacer visitas en el terreno, acompañar a los fumigadores, entregar informes sobre casos de fiebre, ir a las reuniones de la campaña antivectorial, atender la consulta y atender en sus domicilios a los pacientes que no pueden desplazarse. Además, deben velar por cada embarazada, exigir las pruebas citológicas, las donaciones de sangre y detectar a familiares irresponsables en el cuidado de sus ancianos.
"Sí, es verdad que nos pidieron ser 'optimistas' ante los pacientes a la hora de explicarles el porqué de los recortes de energía o la falta de materiales o medicamentos… pero la gente no es tonta ni ciega, o dejó de serlo hace tiempo", dijo la doctora.
Escasez de huevos y ademas demasiado caros
Preocupa al cubano la escasez de huevos. Crece la alarma en la población ante la actual crisis del huevos, el llamado salvavidas cubano. Las inmensas colas para su compra no impiden el acaparmiento de este producto por algunos ciudanos en afectación de la mayoría.
La actual inestabilidad continuada durante el primer trimestre de 2019 en el abastecimiento del huevos en la red de comercio minorista, ha generado tras de si , las multitudinarias colas y un creciente malestar en la población, como resultado de los acaparadores que lo adquieren por cantidades para luego revender a altos precios, sin que el gobierno tome cartas en el asunto.
“Pagué 100 pesos por este cartón de huevos…” aseguró Ana María López, vecina de calle Corrales en la barriada habanera de Belén y tomando en su brazo a su perrita pequinés sentenció: “ella no tiene la culpa, yo la acostumbré a darle un huevito hervido en la mañana, pero esto es un abuso”.
“No me quedó alternativa, tuve que entregar la licencia, a la ONAT no le importa si tienes o no materia prima, a ellos solo les importa cobrar y así no hay quien pueda” declaraba Carlos Quintero, ex trabajador por cuenta propia mientras formaba parte de las decenas de personas que hacían cola con la esperanza de comprar huevos en el otrora Ten Cent de la calle Monte.
Un trabajador de comercio que solicitó el anonimato comentaba que “a nosotros el salario no nos alcanza, como a casi nadie es verdad, pero si un cartón vale 33 pesos y viene alguien y te dice que le separes 20 cartones que te los va a pagar cada uno a 70 pesos… ¿qué vas a hacer? “Eso no pasa con el arroz, nadie compra arroz a 10 pesos la libra porque donde quiera te lo venden a 4 y la única solución de esta crisis la tiene Díaz- Canel que busque la manera de que en todos los comercios vendan huevos que cuando ellos quieren, los problemas se resuelven, el huevo se produce en Cuba ”sentenció.