Las autoridades de Uganda han informado este jueves de la detención de 16 activistas LGTB acusados de mantener relaciones con personas del mismo sexo, una práctica castigada con penas de cárcel --incluso con cadena perpetua-- en el país africano.
Los 16 hombres, de entre 22 y 35 años, fueron detenidos a última hora del lunes en la sede de una ONG dedicada a cuestiones de salud sexual --Lets Walk Uganda-- donde trabajaban y vivían, han explicado compañeros. La sede está situada a las afueras de la capital, Kampala.
Un portavoz de la Policía, Patrick Onyango, ha explicado a la Thomson Reuters Foundation que las fuerzas de seguridad localizaron durante el registro a estas oficinas lubricantes, preservativos y fármacos antirretrovirales, utilizadas por ejemplo para el tratamiento del VIH.
Los exámenes anales realizados a los sospechosos han determinado que "participaron en actos sexuales castigados en el Código Penal", según Onyango. Otro portavoz policial, Fred Enanga, ha confirmado que la Fiscalía examina el caso, sin que por ahora hayan trascendido los cargos exactos que se les pueden imputar.
La comunidad LGTB en Uganda ha denunciado su indefensión y amenazas prácticamente diarias. Las organizaciones han alertado también de una ola de ataques y de al menos cuatro asesinatos este año, el último de ellos el 4 de octubre, cuando un activista fue apaleado hasta la muerte.
Un ministro incluso propuso este mes elevar a pena de muerte el posible castigo para las relaciones entre personas del mismo sexo, pero el Gobierno retiró la propuesta tras la cascada de críticas recibidas y el riesgo a perder las ayudas internacionales.
El director ejecutivo de Minorías Sexuales Uganda, Frank Mugisha, ha destacado lo "inusual" que supone la detención conjunta de 16 personas, "detenidas durante 48 horas por la Policía" y "obligadas a someterse a exámenes anales". "Esperamos que comparezcan hoy ante el juez", ha dicho.