La abogada cubanoamericana y celebridad de la televisión en español de EEUU Ana María Polo anunció un acuerdo con las empresas Cinemat y MGE para lanzar una nueva temporada de su popular programa "Caso cerrado", que dijera adiós en 2019 después de 20 años al aire.

 

MGE difundió la noticia en sus redes sociales: "En esta nueva edición, producida por Cinemat y distribuida por MGE, 'Caso cerrado' llega con nuevo estudio, nuevas secciones, pero la misma fuerza y humanidad que caracterizan a la doctora Polo, y que han hecho del programa el de mayor audiencia entre los hispanos de todo el mundo por más de dos décadas", señaló en su perfil de Instagram.

 

"Nos llena de satisfacción poder contar con la doctora Ana María Polo en esta nueva etapa de 'Caso cerrado', pues, sin duda, no existe un programa ni una personalidad de su talla y con su trayectoria en la industria latinoamericana del entretenimiento", declaró Esperanza Garay, presidenta de MGE.

 

"Los más de 20 millones de seguidores en redes sociales que tiene la doctora Polo consistentemente le piden volver con nuevos programas, y estamos orgullosos de trabajar al lado de Cinemat para hacer ese deseo realidad", agregó.

 

Ninguno de los ejecutivos anticipó cuándo se emitirán los primeros programas de la nueva temporada.

 

Polo, de 63 años, había dicho que abandonaba la televisión para llevar al cine su programa de corte judicial en una película que ella misma protagonizaría. Pero ese proyecto parece haber encallado durante la pandemia.

 

"Caso cerrado", que transmitía la cadena Telemundo, fue un programa que a lo largo de una hora presentaba disputas judiciales. En cada episodio se exponía una demanda, hacían alegaciones y tanto los demandantes como los demandados presentaban testigos para sustentar sus casos.

 

Polo, que aunque no ejerce como abogada desde hace una década aún tiene vigente su licencia para mantenerse actualizada, emitía luego una decisión sobre cada asunto, como si fuera un fallo, basándose en su conocimiento y experiencia legal.

 

El programa abordó diferentes temáticas, desde asuntos de salud, familia y sexualidad, hasta cuestiones de inmigración. Al anunciarse su cierre se habían producido más de 3.500 programas a lo largo de 18 años, y resuelto más de 7.000 casos, y el espacio había sido transmitido en países como Bolivia, Costa Rica, México, Argentina y Colombia, entre otros.