Los 'osos' toman Madrid durante el puente
Una imagen promocional de la fiesta 'Mordisko' orientada a amantes de la barba
Por José Luis Romo / El MundoLa capital de España, Madrid acoge la XV edición del festival gay Mad.Bear, que atrae a unas 5.000 personas con su lúdica oferta de música y fiesta.
Jens es alto, barbudo, corpulento y finlandés. Desde hace cinco años visita Madrid durante el puente de la Constitución. No lo hace por escapar del frío de su país, sino porque en la capital española se celebra por estas fechas el festival Mad.Bear, una quedada internacional de osos repleta de fiestas y actividades por el barrio de Chueca principalmente. Para los no versados en el ambiente gay, los osos son esa subtribu de homosexuales, por lo general barbudos e hirsutos, que rechazan la metrosexualidad y desafían los tópicos afeminados. «Es estupendo venir cada año, hay buen rollo y chicos muy guapos», explica Jens en un español que ha aprendido gracias a un ligue de León, que también vendrá esta semana a Madrid.
Ellos no se han casado, ni tienen intención, pero algunos asistentes a este festival han encontrado incluso marido, según explica Javier, uno de sus organizadores. «Por supuesto que han salido matrimonios de Mad.Bear, de hecho vienen parejas a celebrar aquí su aniversario porque fue el evento en el que se conocieron».
Este año Mad.Bear cumple su 15 aniversario. En su primera edición apenas se juntaron 150 personas y el año pasado llegaron a los 5.000 asistentes. «Para este año esperamos una cifra similar. El crecimiento fue brutal, sobre todo al principio», explica Javier. De hecho, gracias a un ambiente tolerante, Madrid se ha convertido en una de las capitales europeas de los osos. «Al principio, la capital 'osuna' era Colonia pero desde hace 10 años Mad.bear es, con diferencia, el evento más importante de Europa y uno de los festivales más reconocidos del mundo. Madrid es una ciudad donde se hacen amigos fácilmente y eso ayuda para un evento así. Esta ciudad enamora a todo el mundo por su alegría, diversión y buen rollo». Michael y Damien, dos dentistas de Texas que han venido en tres ediciones, le dan la razón. «Los chicos aquí son muy simpáticos».
Los actos comenzaron el miércoles 2 y se prolongarán hasta el próximo miércoles. Cada noche hay una fiesta como la música electrónica con protagonista (por lo general). Entre los bares destacados que participan está el Bear's Bar (Pelayo, 4), el The Paso (Constanilla Capuchinos, 1) o el Fraggel Pop (Belén, 6) y en el recorrido también hay sugerencias de cafés, tiendas y saunas. Además, se organizan varias cenas para que los asistentes confraternicen (se puede consultar el programa completo en su web www.madbear.org).
Pero la actividad 'osezna' de la ciudad no termina con este festival. También estos días se celebran ediciones especiales de Mordisko, una de las sesiones de referencia para los amantes de las barbas. «Lo de fiesta de referencia suena demasiado pretencioso, dejémoslo en que estamos teniendo bastante repercusión, y que ha sido totalmente inesperada», explica Raúl Valentín, su creador, quien, harto de no encontrar en la noche madrileña una fiesta que le motivara, decidió crear esta sesión. «¿Desde cuándo a un tío le gusta ver a tíos disfrazados de mujer bailando o amenizando una fiesta en vez de a tíos bailando que es lo que realmente les pone? No es que sea necesario venir con barba, pero para mi disfrute aquí vienen muchas».
El sábado 5, Mordisko celebrará su versión grande en la sala Changó (Covarrubias, 42) para 500 personas y el lunes 7 volverá a su ubicación habitual en el Club 33 (Cabeza, 33). «Queríamos un ambiente que fuera propicio para conocer y dejarse conocer, en el que, si encima te gusta la música y te diviertes, te vas a casa con un buen sabor de boca y quieres traer a tus amigos... y si, encima, ligas pues mejor». ¿Se pasará la moda de los gays barbudos? «Creo que las barbas nunca se han ido. Y que entre barbas nos entendemos bien».
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