Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: Hay imágenes que retratan una época, de las mascaras al rostro
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: cubanodelmundo  (Mensaje original) Enviado: 25/06/2016 19:08
DE LA MÁSCARA AL ROSTRO  
 
1175+cuba+obama+castro+day+3+add(1)_(2).jpg (640×473)
Hay imágenes que retratan una época.
                 Por Andrés Reynado - El Nuevo Herald
En La Habana, el ex secretario de Comercio, Carlos Gutiérrez, y Reinaldo Taladrid, uno de los más repugnantes personajes de la dictadura cubana, charlando animadamente, graciosamente, con el presidente Barack Obama.
 
En Coral Gables, Gutiérrez y Taladrid compartiendo mesa con Max Lesnik, uno de los más fieles devotos de esa monstruosa superchería que se llama Fidel Castro.
 
Taladrid encarna la deleznable trinidad castrista del propagandista, el policía y el oportunista. En Gutiérrez tenemos una dolorosa y rotunda muestra de esa vergonzosa cepa de exiliados (pudiéramos decir ex exiliados) que nos venden como mezquina redención nacional el tránsito del castrismo sin mercado al castrismo con mercado.
 
Cada cual saca sus conclusiones. A todas luces, existe un creciente vínculo entre figuras de la élite castrista y prominentes cubanoamericanos que durante años desarrollaron una agresiva campaña a favor de las relaciones entre Washington y La Habana. Aparte de sus manifestaciones públicas, varios de estos cónsules mantienen una frenética agenda subterránea contactando a conocidos y desconocidos para embullarlos a viajar a Cuba a fin de observar “los cambios de Raúl” y solicitar apoyo a iniciativas procastristas como la fallida apertura de un consulado en Miami Beach. Agreguemos las atenciones de diverso género a los visitantes de la nomenclatura y de “la embajada”, como se les oye decir en clave familiar.
 
Un mediocre conocimiento de la historia en general y el castrismo en particular bastan para comprender los mecanismos que mueven esta pujante maquinaria. De cualquier manera, la peor de nuestras sospechas es menos incriminante que sus obras. Más incriminante aún que las obras es su silencio frente a la represión y el atrincheramiento del raulismo. La alevosía de hoy sugiere la premeditación de ayer. A estas alturas, el problema no reside tanto en lo que han hecho y seguirán haciendo ellos como en lo que no hacemos y seguimos sin hacer nosotros.
 
Las imágenes de Taladrid, si emblemáticas, distan de ser únicas. Recientemente, el candidato a una importante posición electa del sur de la Florida se pavoneaba junto a Enrique Román, veterano agente de la inteligencia cubana con una atronadora trayectoria en el aparato ideológico. Luego, el candidato hacía el besamanos en un evento de una empresa de televisión que transmitirá en breve programación seleccionada por el Instituto Cubano de Radio y Televisión.
 
La infiltración en los medios locales va adquiriendo el peso de una política editorial. En CNN en Español, por ejemplo, suelen aparecer con frecuencia Jorge Gómez Barata, Amaury Pérez y otros voceros oficialistas de ambas orillas para responder a preguntas de sastre que, en algunas ocasiones, sonrojarían a los mismos panelistas de la Mesa Redonda. Así, en la liviana magia de la televisión, la tragedia viene a interpretarse como el estúpido estorbo de la gozadera y los diez años de Raúl en el poder (no digamos ya los 47 de Fidel) consiguen el blindaje acrítico, jovial y hasta reconstituyente de un minuto de fama.
 
Oscar Elías Biscet observaba que el problema de Cuba no era político sino moral. Por extensión, ese es el problema del exilio. Todos los días salen veinte vuelos repletos de gentes que juraron ser perseguidos políticos para obtener la residencia de Estados Unidos. Este verano, muchas familias de Miami están enviando a sus hijos de vacaciones a la isla. Lo atrozmente confuso, lo insidiosamente corruptor, es que la mayoría de estos viajeros al parque temático de la opresión dicen ser anticastristas. La máscara de la doble moral se ha convertido en rostro.
 
No extraña, entonces, que el retrato de esta época cubana sea una espeluznante caricatura.
  
miseria_cubana.jpg (640×400)
  


Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados