¡Buen provecho!
Breve historia de la hamburguesa
Hoy 28 de mayo es el Día Internacional de la Hamburguesa
Te contamos diez curiosidades del plato más famoso del mundo
Mamá mía, ya todo tiene su día festivo, como diria un amigo español, joder tío, qué ya no saben que inventar, jajaja, al paso que vamos va haber también un día internacional para no ir al baño..
Seamos realistas: la Breve historia del tiempo de Stephen Hawking es un libro fundamental para entender quiénes somos, qué hacemos en el universo y cómo es posible que Trump sea presidente de la mayor potencia mundial. Pero pensamos mucho más a menudo en comer que en agujeros negros. Por eso, se nos ha ocurrido que este artículo, aprovechando el Día Mundial de la Hamburguesa, era necesario. Lo sentimos, señor Hawking, pero somos burgerheads, fanáticos del plato norteamericano más conocido que…
Viene de Alemania, no nos olvidemos. En este sentido, el origen de la palabra “hamburger” como procedente de Hamburgo, segunda ciudad de Alemania, parece claro. En 1758, el libro de cocina The Art of Cookery made Plain and Easy, un best-seller de la época, hacía referencia a las hamburgh sausages, servidas “con pan tostado por debajo”. Vale, aún no era la hamburguesa tal y cómo la conocemos, pero es un inicio.
Bendita inmigración. Hay referencias de que en la Hamburg America Line, que conectó Alemania con Estados Unidos a partir de la segunda mitad del siglo XIX, se vendían filetitos entre dos piezas de pan: es la protohamburguesa, afianzando el nombre con el que pasaría a la posteridad.
Una paternidad dudosa. Hay tres contendientes que se atribuyen la paternidad de la hamburguesa, tal y como la conocemos actualmente.Fletcher Davis abrió en 1880 un mostrador en Athens, Texas, para servir un bocadillo de hamburguesa con cebolla, mostaza e incluso un pepinillo. Otros aseguran que fueron los hermanos Frank y Charles Menches los que durante una feria en 1885, se quedaron sin salchichas para los bocadillos e introdujeron los filetes de ternera. Unos sitúan el evento en Akron, Ohio, y otros en… Hamburg, Nueva York. El tercer posible padre de la criatura esLouis Lassen, propietario de Louis' Lunch, un carro de comida situado en New Haven, Connecticut, que comenzó a ofrecer hamburguesas en 1900, según las crónicas de la época.
Popular gracias a los ‘food trucks’. Todo parece indicar que el plato se hizo popular gracias a ellos, aunque, lógicamente, se llamaban de otra manera en aquella época. Los carros de comida y ‘sandwiches cars’ aparcaban en las calles y ofrecían comida sin pretensiones. Sobre uno de ellos publicaba el Chicago Tribune en 1896 que servía ‘hamburger steak sandwichs’, “con la carne preparada en pequeñas patties (literalmente, medallones de carne) que se cocinaban al momento mientras la gente esperaba al surtidor de gasolina”.
Las primeras cadenas. White Castle, fundado en Wichita (Kansas) en 1921, está considerada la primera cadena de ‘fast food’ de la historia de Estados Unidos. Popularizaron las hamburguesas en formato pequeño, que llamaron ‘sliders’. Actualmente, mantienen 400 restaurantes abiertos en 12 estados.
Wimpy (o Pilón) el primer adicto al ‘fast food’. En el año 34, E.C. Segar, creador de Popeye, creó el personaje de Wimpy (conocido como Pilón en España). Este compañero incansable de Popeye era adicto, sí, a las hamburguesas. El mismo año, e inspirado en él, abrió el restaurante Wimpy.
Con los 40… llega McDonald’s. Fundado por los hermanos del mismo apellido, lo que empezó como un modesto restaurante en San Bernardino, California, terminó siendo la marca de hostelería más popular del mundo. Tuvo que entrar un visionario, Ray Kroc, que les compró en 1961 el negocio a los McDonald’s. Y de ahí al infinito y más allá. La película El fundador, con Michael Keaton en el rol de Kroc, el listo de la historia, lo cuenta divinamente.
¿Y cuándo llegó a España? Si le pica la curiosidad, esto lo contamos aquí.
El nacimiento de la hamburguesa gourmet. La hamburguesa pasó de ser un plato considerado poco sofisticado a un tótem de los foodies de nueva generación. El arranque del siglo XXI trajo consigo la apertura de las primeras hamburgueserías gourmet. Home Burger, que nació en Madrid en 2006, es un ejemplo con su carne ecológica certificada y recetas que van más allá de la clásica cheeseburger.
Ya hay hamburguesas hechas en laboratorio. Muchas cadenas y millones de hamburguesas después, en 2013, nació la primera que incorporaba carne hecha en un laboratorio donde se sintetizó a partir de células madre de vaca. La Universidad de Maastricht estuvo detrás de este proyecto pionero, patrocinado por Sergey Brin, cofundador de Google. Da un poco de miedo, pero mientras esté buena…
Frita cubana
Frita cubana, la otra hamburguesa, estilo cubana
Casi siempre que devoro una hamburguesa me viene a la memoria, la frita cubana, se parecen mucho pero no son iguales, ni saben igual... Yo no la comó hace más de 40 años, así que mis recuerdos siempre serán mejor de lo que en realidad era la frita cubana.. Se que en Miami hacen la frita cubana muy buena, pero cuando he visitado esa ciudad, lo que menos he querido comer es la frita cubana.. En fin que la frita cubana también merece tener su Día.
La frita siempre formó parte del menú de los cubanos que paseaban por barrios y calles de las distintas provincias cubanas y fundamentalmente de La Habana. Era barata, asi que se hacia común observar muchas personas alrededor de los puestos en el desayuno, merienda, almuerzo o comida.
El carrito tenía un balón o bala de gas cilíndrico a su costado y esto estaba conectado a una especie de cocina donde se cocinaban las fritas.
Algunos lograban conectarse con alguna fuente eléctrica y tenían una buena iluminación. En cambio, otros se valían de la luz del portal del comercio donde se ubicaban. El fritero ( así se le llamaba al que estaba al frente del puesto de frita ) era casi siempre el propietario del carrito y eran muy hábiles para la preparación de las diferentes ofertas.
Recuerdo dos(existían mucho mas) puesto de frita que había en mi barrío Santos Suarez,uno en la calle correa esquina Rabi y el otro en el portar de la casa de Abelardo en la calle Cocos entre San Indalecio y San Benigno.
Un olor cárnico le precedía y anunciaba las apetitosas fritas: suaves panecillos redondos a los que se ponía en el interior una ligera película de pasta de tomate y la poderosa mixtura frita de carne picada de vaca con chorizo y diversas especias.
En la esquina de Zapata y A, en el Vedado, fue la cuna del primer puesto de fritas que vio la luz, y de allí se mudó a Paseo y Zapata. Al gallego Sebastián Carro, inicialmente carbonero, se le encendió la chispa al aparecer el gas como combustible doméstico en sustitución del carbón. Parece ser que decidió mejorarse la vida dejando de lado tanto tizne y apostarlo todo por los cucharones y las freidoras, ganándose así la paternidad de la frita.
Quizás ni él mismo sabía que estaba haciéndole espacio a la que se erigiría en reina de la gastronomía cubana de timbiriches, desplazando incluso a los famosos hot dogs y hasta a los tamales. Solo el café con leche le disputaba el sitial de honor.
El secreto del sabor era la manteca con pimentón que le agregaban al picadillo. Dicha manteca provenía de las latas de chorizo, ya sin el embutido, que los bodegueros vendían a los friteros.
Ilustres figuras, incluso foráneas, atestiguan del lugar que ocupaba en la vida cubana este alimento. Tanto es así que Federico García Lorca, en su visita a nuestra capital en marzo de 1930 –según escribió el Doctor Emilio Roig de Leuchsenring, historiador de La Habana–, a las puertas de la madrugada frecuentaba bares y cafés, acompañado por su paisano musicólogo Adolfo Salazar, y terminaba sus noches en «las fritas de Marianao.
Al principio del castrismo, cuando la escasez comenzaba, a las fritas le decían «miracielo», porque le ponían tanta harina a su masa para que la carne rindiera que se pegaba al cielo de la boca. Aquello era una falta de respeto a nuestra típica y sabrosa frita, tal es así que muchos la comenzaron a odiar y no quisieron oír hablar más de ella. Después de 1990, la frita es un sueño imposible, porque no existe para la población ningún tipo de carne de res.
Receta de la Fritas Cubanas tradicional, Ingredientes:
Coja un poco de picadillo y póngale unos dientes de ajo triturados, sal y pimienta al gusto, una pizca de comino y otra
de orégano y, sobre todo, bastante pimentón» (hasta que se vea rojiza casi como un chorizo).
Mezcle la masa muy bien con las manos hasta que todos los ingredientes se unan. Divida la carne en porciones del tamaño
de una bola pequeña de helado. Páselas por la sartén con un mínimo de grasa, aplastándola con una espátula hasta lograr
un medallón muy delgado
Ponga el medallón en un pan redondo. Salpíquelo de cebolla cruda picadita y catsup más un montón de papitas fritas bien finita.